En un logro que marca diez años de constante dedicación y éxito, el Joven Ballet Impulsa de la Escuela de Ballet Carmina Ocaña y Pablo Savoye se ha posicionado como una destacada institución de formación profesional en el ámbito nacional del ballet y del ballet en Madrid en particular. Conectando la pasión por el ballet clásico con un enfoque moderno, el Joven Ballet Impulsa es el fruto de una colaboración excepcional entre dos figuras prominentes en el mundo de la danza: Carmina Ocaña y Pablo Savoye.
10 años de trayectoria y experiencia en formación profesional
Desde su fundación en el año 2013, cuando Pablo lanza una idea innovadora para compensar y llenar la falta de continuidad y de formación específica entre finalizar los estudios, -como pueden ser en un conservatorio o una escuela privada-, y la integración en una compañía o a la vida profesional, el Joven Ballet Impulsa ha sido la respuesta a la creciente demanda de una educación de calidad en ballet y el eslabón que faltaba para tender un puente hacia el mundo laboral. Durante esta década, muchos de sus graduados han alcanzado niveles sobresalientes, consolidando sus sueños en una realidad tangible. No es sorprendente que el impacto de esta institución haya sido palpable, con innumerables alumnos que han cruzado el umbral hacia prestigiosas compañías de ballet, incluyendo el Ballet Nacional de Finlandia, el Ballet Estatal de Varna y el renombrado Teatro Mariinsky, antiguamente conocido como el Kirov Ballet de San Petersburgo, así como el ENB de Londres o en la Compañía Nacional de Danza de España.
En el corazón de la enseñanza del Joven Ballet Impulsa reside la rigurosa formación en técnicas de ballet clásico. Desde pasos emblemáticos hasta movimientos y secuencias específicas, la escuela ofrece una sólida base técnica para poder abordar cualquier estilo y repertorio presente en las compañías profesionales del panorama actual. Sin embargo, la enseñanza va más allá, enfocándose en la interpretación y la expresión artística. Los estudiantes aprenden a transmitir emociones y narrativas a través de su movimiento y expresión corporal, enriqueciendo así sus habilidades como intérpretes y bailarines.
La pandemia no fue un obstáculo para el Joven Ballet Impulsa, que mantuvo su rumbo con esfuerzo y determinación. Hoy en día, la escuela sigue inspirando a estudiantes de todas las edades para aprender y disfrutar del ballet con un enfoque profesional.
El equipo de profesores, enriquecido por figuras como Elisa del Campo, alumna destacada de Carmina; Andreas Anghel, un experto en preparación física para bailarines; los reconocidos profesores de danza contemporánea Allan Falieri y Rebeca Falcón; invitados de lujo como Noah Gelbert (especialista y reponedor internacional del repertorio del famoso coreógrafo William Forsythe); Yannick Boquin, Star Ballet Master; junto a la apreciada exbailarina de la CND Aída Badia y el coreógrafo de moda en danza contemporánea Antonio Ruz aseguran una experiencia formativa enriquecedora.
El respaldo de la formación profesional para adultos de Joven Ballet Impulsa
Un pilar fundamental de esta década exitosa es la colaboración entre dos mentes creativas y maestros excepcionales: Carmina Ocaña y Pablo Savoye. Desde que forjaron esta alianza en 2003, han dirigido una escuela que hoy en día lleva sus nombres, la Escuela de Ballet Carmina Ocaña y Pablo Savoye. Esta tiene el mérito de estar especializada en la enseñanza del ballet clásico desde su fundación en 1968. El ballet clásico, una base esencial en el aprendizaje de cualquier técnica de danza, no solo es la pasión de bailarines clásicos, sino también de intérpretes de danza española, neoclásica, contemporánea y de aquellos que valoran la técnica clásica académica en su formación.
En la Escuela de Ballet Carmina Ocaña y Pablo Savoye, la puerta está abierta para todos los interesados, independientemente de su nivel, edad o aspiración profesional. La escuela acoge a quienes buscan una formación de calidad, con una filosofía docente que va más allá aula de clases, brindando a los alumnos información sobre audiciones, compañías, coreógrafos y espectáculos, para que estén plenamente integrados en el mundo de la danza.
El Joven Ballet Impulsa, con su década de logros, es un centro de excelencia en la formación profesional en ballet en Madrid. Con un enfoque inclusivo, riguroso y expresivo, ha demostrado que el ballet es una disciplina que puede ser disfrutada y dominada por todos, sin importar la edad o el nivel de experiencia.