Así lo recoge la Asociación Hipotecaria Española en su informe ‘Tasas de dudosidad del crédito inmobiliario’, publicado este miércoles, en el que señala que esta mejora es “fruto tanto de la buena marcha de la economía como de la gestión activa por parte de las entidades en el desagüe de las carteras de activos problemáticos traspasadas a grandes fondos de inversión”.

En concreto, la morosidad del sector privado residente mejoró dos puntos porcentuales, desde el 8,8% registrado en marzo de 2017 hasta el 6,8% un año más tarde.

Por sectores institucionales, la dudosidad mejoró tanto en las sociedades no financieras como en la actividad de hogares. En el caso de la financiación a la adquisición de vivienda la morosidad mostró, después de cinco trimestres consecutivos con una tasa en el 4,7%, una caída de 0,2 puntos que sitúa la tasa en el 4,5% en este primer trimestre del año.

En este sentido, la AHE indicó que “su recuperación es visiblemente menor, entre otras razones, porque no se está interviniendo de forma tan activa en la ejecución hipotecaria al objeto de proteger a los colectivos más vulnerables, ante la sensibilidad que reviste este asunto”.

Por otro lado, la tasa de dudosidad de las actividades de promoción inmobiliaria cerró marzo de 2018 en 12,5%, lo que contrasta “notablemente” con el 24,1% observado en el mismo periodo del año anterior.