La Asociación Monárquica Europea lamentó este lunes que el juez José Castro, a pesar de la oposición del fiscal Pedro Horrach, haya decidido sentar en el banquillo a la infanta Cristina «sin prueba alguna, sólo con indicios».

Así se manifestó el portavoz de la Asociación Monárquica Europea, Juan Marcos Vallejo, acerca de la decisión del juez Castro por el que la infanta Cristina deberá sentarse en el banquillo como cooperadora necesaria en dos delitos contra la Hacienda Pública cometidos por su marido, Iñaki Urdangarin.

Marcos Vallejo censuró que «la Infanta ha sido juzgada y condenada desde el primer momento en el que apareció implicada en el ‘caso Nóos’» y que «a pesar de que el fiscal, la Abogacía del Estado y Hacienda, que sería la principal perjudicada, están a favor de que no vaya a juicio porque sólo hay indicios y sospechas, el juez, apoyándose únicamente en la acusación popular, decide tomar esta decisión».

Esta decisión, insistió, pone de manifiesto que «la Justicia no es igual para todos», lo que ha provocado que la imagen de la Monarquía, «a pesar del papel de Felipe VI en sus primeros seis meses de reinado que puso un cortafuegos al respecto, queda dañada».

Por último, reconoció que «si la Infanta finalmente se tiene que sentar en el banquillo, debería renunciar a sus derechos dinásticos, porque está en la línea de sucesión a la Corona».

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