Soraya Sáenz de Santamaría ha anunciado en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros que se ha abierto una investigación para tratar este suceso de «gravedad extrema»
La Audiencia Nacional ha abierto una investigación para estudiar el incidente que obligó a suspender durante más de tres horas ayer los servicios del AVE entre las estaciones de Camp de Tarragona y Figueres en Girona, saldándose con más de 40 trenes y 13.000 viajeros afectados.
Así lo ha anunciado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros, quien ha asegurado que «todo apunta a un sabotaje» y que se trata de un suceso de «gravedad extrema».
Por ello, la vicepresidenta ha señalado que el Gobierno quiere que la investigación llegue hasta el final y ha pedido «máximo respecto» para la misma.
El incidente de este jueves, que se originó sobre las 7.30 horas de la mañana, vino provocado por un acto vandálico en el punto kilométrico 570 a la altura de La Granada (Barcelona), originado por varios cortes en la fibra óptica principal y accesoria del AVE. Este hecho provocó la interrupción del contacto con el centro de comunicaciones y obligó a cortar la circulación, aunque a primera hora de la tarde el servicio volvió a normalizarse.
Asun Infante