El cooperativismo es uno de los modelos de negocio más populares en todo el mundo. Sus principales valores consisten en establecer un sentido de pertenencia a través de la participación ciudadana, el desarrollo independiente y el interés por las comunidades.

Esta dinámica de trabajo es la que implementan desde la Cooperativa Agrícola de Llorenç del Penedès. En esta, se dedican a comercializar vinos, cavas y aceites de elaboración propia, teniendo como ejes la calidad en cada uno de sus productos, el desarrollo sostenible y la venta de proximidad.

El cooperativismo permite fortalecer el rol de los pequeños productores en la sociedad

Una de las principales actividades económicas a destacar del pueblo de Llorenç del Penedès es la agricultura de secano. A través de este procedimiento, donde la producción es 100 % natural, ya que se utiliza únicamente el recurso del clima, se logran cultivar olivos, y viña.

En este entorno ecológico y respetuoso con el medioambiente, surge la Cooperativa Agrícola de Llorenç del Penedès. La entidad cuenta con más de 110 socios productores viticultores de la localidad y de pequeños pueblos aledaños, que tienen la oportunidad de producir desde su propia comunidad para el autoconsumo y la exportació a diferentes zonas del mundo.

Los niveles de comercialización anuales a nivel nacional e internacional superan las 50.000 botellas de vino y 150.000 de cava.

Asimismo, todo el proceso de venta está a cargo de la propia cooperativa, una acción que genera un valor agregado clave para potenciar la producción cooperativista, permitiendo planificar de pequeña a gran escala y con recursos propios.

Las ventajas del modelo de negocio cooperativista y la importancia de la venta de proximidad

Las cooperativas son organizaciones voluntarias y abiertas para cualquier persona de la sociedad civil, realizan sus gestiones de forma democrática tomando las decisiones de manera conjunta y trabajan con independencia y autonomía impidiendo que intercedan gobiernos, multinacionales o marcas que disponen de una mayor influencia en el mercado.

Otra de las ventajas que convierte al modelo de negocio cooperativista en una opción ideal para afrontar las demandas que exige el mundo del presente, se centra en que las cooperativas son espacios que fortalecen el tejido social de los ciudadanos que residen en pequeñas comunidades, como es el caso de los productores viticultores del pueblo de Llorenç del Penedès.

Esta metodología de trabajo en red les otorga a estos trabajadores la oportunidad de transformar su realidad económica sin perder de vista la identidad cultural de sus poblaciones.

Con un modelo cooperativista integral y dinámico, que tiene como pilar de desarrollo la venta de proximidad (elaboraciones 100 % naturales sin aditivos ni agregados químicos), la Cooperativa Agrícola de Llorenç del Penedès se presenta como el sitio ideal para adquirir vinos, cavas y aceites frescos, sostenibles y de buena relación precio-calidad.