La creación de empleo en las pequeñas y medianas empresas (pymes)crecerá un 2% en 2024, llegando a los 219.064 afiliados, un porcentaje un 0,9 puntos menor al que se registrará al cierre de 2023, según las previsiones publicadas en el Boletín trimestral de empleo en las pymes del segundo trimestre de 2023 de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) y Randstad Research.
En el estudio explican que aunque para 2024 se espera que se mantengan en positivo las cifras de generación de empleo, la moderación de su intensidad se hace extensible a tres de los cuatro grandes agregados sectoriales (servicios, industria y construcción), dejando fuera de estas perspectivas al sector agrario.
Como consecuencia, el crecimiento del empleo para las pymes en 2024 se prevé que se reduzca con respecto a la expectativa de creación al cierre de 2023, que Cepyme espera sea de 302.511 afiliados, un 2,9% más respecto al año anterior. Marcando una tendencia de desaceleración igualmente respecto a 2022, cuando el crecimiento fue de 5,2%.
El director de Economía de Cepyme, Francisco Vidal, ha explicado en la presentación del boletín que el contexto en el que se dan estas previsiones responde a un «escenario adverso» para las pymes, entre el incremento de los costes laborales, el coste de la financiación y la alta inflación.
«A estas empresas de uno a cinco trabajadores, con la cantidad de cargas administrativas que están teniendo, les resulta muy difícil crecer y ser productivas. Esto está ocurriendo en un contexto en el que los costes laborales están creciendo de forma relevante… llevamos cuatro trimestres con crecimientos por encima del 5%. En términos interanuales, las pymes tienen una subida del 12% de esos costes laborales», ha explicado.
LAS MICROPYMES: UN CRECIMIENTO DEL EMPLEO DE MENOS DEL 1% EN 2024
Por tamaño de empresas, el estudio destaca que en los dos últimos trimestres de 2024 hay potencial para crecimientos del empleo por encima del 3% en todos los tramos menos en las microempresas (de menos de 10 asalariados), donde el empleo crecerá en sendos trimestres entre el 1% y el 1,5%, tras un retroceso previsto del 0,6% interanual entre abril y
junio.
Para el conjunto de 2024, se espera que las micropymes registren un crecimiento más modesto, de solo un 0,8%, llegando a los 25.771 afiliados. En este tramo de empresas, los sectores de la industria y la construcción son los que lastran este impulso, ya que incluso el estudio prevé destrucción de puestos de trabajo en ambos. Solamente agricultura, de forma marginal (546 afiliados) y servicios (34.873) registrarían incrementos.
«Dentro del sector servicios, esperamos que se concentre esa creación de empleo de las micropymes en el contexto de hostelería, tanto en el segmento de alojamiento como en el de bares y restaurantes, como también en el sector de actividades deportivas y de entretenimiento», ha explicado en la presentación el director de Randstad Research, Valentín Bote.
Para este tipo de empresa, Cepyme ha pedido un marco normativo que propicie la ganancia de tamaño y que disuelva las trabas que dificultan el crecimiento a este tipo de negocios, tanto desde el punto de vista del esfuerzo fiscal y en cotizaciones como de la regulación y las barreras administrativas. Al cierre de 2023, el estudio prevé que el empleo crezca en las micropymes un 0,5% respecto al año anterior, alcanzando los 17.626 afiliados.
De su lado, las pequeñas empresas (de 10 a 49 asalariados) cerrarían el 2024 con un crecimiento del empleo del 2,6% (1,2 puntos menos que en 2023) llegando a los 104.046 afiliados. Y las empresas medianas (de 50 a 249 empleados) conseguirían un incremento del 2,5% (1,5 puntos menos que este año), con 89.247 afiliados, siendo el sector servicios el que más aporta en ambos tamaños de negocios.
El informe también destaca que las pymes han mantenido y reforzado su compromiso con el empleo durante 2023, especialmente en el segmento de firmas medianas (entre 50 y 250 trabajadores), con 160.057 empleados más, lo que supone un aumento interanual del 4,6%. Unido al aumento del 0,5% en las microempresas, del 3,7% en las pequeñas y del 4,8% en las grandes, el segundo trimestre de 2023 arrojó un alza del 2,7% en la afiliación a la Seguridad Social.
LA REDUCCIÓN DE LA JORNADA LABORAL TENDRÍA UN «IMPACTO NEGATIVO»
Al ser preguntado sobre cuál sería el efecto de la propuesta de reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales sin rebaja salarial, incluido en el acuerdo de Gobierno entre PSOE y Sumar, sobre estas cifras, el secretario general de Cepyme, Luis Aribayos, ha comentado que «podría inferirse» que tendría «un impacto negativo en la productividad empresarial».
Asimismo, ha añadido que esto provocaría un crecimiento del empleo menos acelerado del expuesto en el estudio, «es decir, una atemperación en el ritmo de creación de empleo». No obstante, ha matizado que «ahora todavía es prematuro para poder lanzar una cifra de qué implicaría en términos de corrección» respecto a lo publicado, «pero cabría esperar, sobre todo en ciertos sectores donde el ajuste podría ser más intenso, ver una reducción a la baja en la previsión de creación de empleo más importante».
«Por lo tanto, a priori, el efecto desde el punto de vista, insisto, de los costes laborales unitarios, que es lo realmente importante para la empresa, es negativo y ese efecto negativo, con unos mayores costes laborales unitarios, cabe esperar que pase factura a las decisiones de contratación», ha añadido.