La mitad de los europeos quiere decidir sobre su futuro en la UE

Un último estudio desvela, que coincide con la celebración del día de Europa, que el 45% de los ciudadanos estaría de acuerdo con celebrar un referéndum al estilo británico

El nueve de mayo de 1950, con el Viejo Continente aun saliendo de los devastadores efectos que la II Guerra Mundial había dejado tras de sí, el que fuera ministro de Asuntos Exteriores en Francia, Robert Schuman pronunció en París un discurso en el que se pedía la administración conjunta del carbón y el acero galo y alemán.

Un texto que la Comisión Europea considera el germen de la actual Unión Europea –aunque existieran autores, como el español Ortega y Gasset que ya habrían pedido la creación de los Estados Unidos de Europa anteriormente-.

El caso es que aquella idea se transformó en el germen de lo que más tarde se convirtió en la Comunidad Europea del Acero y del carbón (CECA). De vuelta al presente, este lunes  y coincidiendo con el día de la llamada Declaración Schuman, se celebra como todos los años –desde 1985- el día de Europa para conmemorar aquella fecha.

Así, el primer germen -exclusivamente comercial-, fundado por Francia, Bélgica, Luxemburgo, Italia, Países Bajos y Alemania fue creciendo hasta convertirse en la entidad que hoy conocemos. De seis miembros se ha pasado a 28 en la actualidad, se ha avanzado en la unión en muchos sentidos -como la llegada de la moneda común al mercado en 2002-; aunque también se han sucedido fracasos como el de la Constitución Europea.

Los éxitos se podrían enumerar como muchos; sin embargo, en la actualidad Europa debe hacer frente a un sinfín de retos que amenazan con la tranquilidad comunitaria.

Los retos de Europa

Sin embargo, Europa no está viviendo sus mejores días. De hecho, la celebración del Brexit el próximo 23 de junio –en el que se decidirá la permanencia de Reino Unido en la entidad supranacional- se ha convertido en una de las mayores crisis a las que se tiene que hacer frente.

Una situación que podría trasladarse a otros de los estados miembros. De hecho, Ipsos-MORI ha hecho público este lunes un estudio de investigación del que se desprende que a casi la mitad de los ciudadanos de ocho países europeos, un 45 %, querrían decidir sobre su continuidad en la entidad comunitaria.

Bélgica, Francia, Alemania, Italia, Suecia y España conformarían este grupo de naciones, a las que no le importaría celebrar su propio referéndum –al estilo británico- en el que se tomara la decisión.

Italia y Francia muestran las mayores tasas en este sentido –con un 48 y un 41%-; mientras que Polonia y España muestran las tasas más bajas con un 22 y 26 puntos porcentuales respectivamente.

«Los italianos en particular esperan tener su propia oportunidad para ir a las urnas sobre la pertenencia a la UE, algo que deja una sensación de que aunque los británicos voten para quedarse, no será el fin de las tribulaciones del bloque”, declaraba sobre la cuestión el director de investigación social de Ipsos-Mori, Bobby Duffy.

Por otro lado, la difícil situación griega o el auge de nacionalismos como el de Cataluña o Escocia se transforman en elementos desestabilizadores para lo que se debía convertir en los ‘Estados Unidos de Europa’.

Actos de celebración

Sin embargo, y a pesar de los retos que se abren, las instituciones comunitarias siguen celebrando con orgullo la fecha. El Parlamento Europeo, por ejemplo, con sede en Estrasburgo, ha abierto sus puertas al público para acercar su función a los ciudadanos. Un acto que se repite a lo largo de los años.

Mientras tanto, otras tantas instituciones también se sumarán a esta propuesta como acto de celebración y júbilo.

Por su parte, el presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, ha publicado en su cuenta personal de Twitter un mensaje claro hacia la unión: “Feliz Día de Europa, un proyecto de éxito que debemos reforzar y en el que creemos. Juntos somos más fuertes; la Unión Europea, nuestro futuro».