El nuevo mecanismo entrará en vigor el próximo 1 de julio
El Ministerio de Industria, Energía y Turismo publicó ayer en el BOE, como ya adelantó DF, la resolución que pone en marcha el nuevo sistema de facturación eléctrica por horas para los consumidores que ya tienen instalado el contador “inteligente”.
El nuevo sistema empezará a aplicarse a partir del próximo 1 de julio, aunque tanto comercializadores como distribuidoras tendrán como plazo hasta octubre para implantar el nuevo mecanismo.
De este modo, la factura se calculará dependiendo del consumo que realice el usuario cada hora y de la cotización de la electricidad en ese momento en el mercado mayorista. Por ello, el precio para cada día se podrá consultar el día anterior a partir de las 20:15 horas en la web de Red Eléctrica de España (REE).
No obstante, además de disponer del contador inteligente, será necesario que el usuario tenga la tarifa regulada, que es conocida desde el pasado año como Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC).
Con la implantación de este nuevo sistema, se prevé que el precio del kilovatio hora afecte al 37 por ciento del recibo. Por su parte, un 25 por ciento corresponderá a impuestos y el 38 por ciento restante servirá para sufragar los costes regulados del sistema.
Además, al tratarse de un mecanismo de tarifa regulada solo podrá ser suministrada por las comercializadoras de referencia, Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, EDP España y E.ON España.
Cambios para el consumidor
Según señalan desde el Ministerio, este nuevo mecanismo permitirá al consumidor tener una mayor señal del precio de la electricidad y adoptar comportamientos de consumo más eficientes que le permitan ahorrar en su factura, ya que el usuario dispondrá de más información y sabrá qué cantidad de energía está consumiendo en cada momento.
Asimismo, se permitirá una lectura real del consumo en cada momento, «lo que mejora la transparencia, elimina las lecturas estimadas y permite disminuir posibles errores», además de «detectar el fraude con mayor facilidad» puesto que, aseguran, son contadores «difícilmente manipulables».
Asun Infante