Las VTC (vehículos de transporte con conductor) se han concentrado en Madrid para protestar por la política llevada a cabo por el Ministerio de Fomento en el sector del transporte urbano, un día antes de la aprobación del real decreto que permitirá transferir la gestión de las licencias a las comunidades autónomas.
La movilización, que cuenta también con el respaldo de UGT y el Sindicato Libre de Trabajadores, arrancó a las 11.00 horas de la glorieta de Emilio Castelar y ha concluido en Nuevos Ministerios, a la puerta del departamento dirigido por José Luis Ábalos.
Bajo el lema, «por el derecho a trabajar», el secretario general del SLT, Julio Muñoz Reja, ha expresado su intención de «convivir con los taxistas», pero insiste en que «no se debe legislar con carácter de urgencia cuestiones complejas». Muñoz Reja agregó que «hay más de 20.000 puestos de trabajo y posiblemente algunos más dentro de algunos meses pero entendemos que no se pueden perder» y opinó además que «conjuntamente ambos sectores pueden trabajar en las grandes ciudades sin ningún tipo de problemas».
Preguntado por este diario sobre su reacción frente al real decreto del Gobierno Muñoz precisó que «no radicalizaremos la situación pues creemos que estamos haciendo las cosas como debemos»; y agregó que «la mayor defensa es que los ciudadanos nos están apoyando cada días más; que con los votos en las urnas los políticos lo pagan y esto podría ser un fracaso del PSOE si no nos oyen».
El sector ha aprovechado la oportunidad para negar categóricamente las acusaciones de «ilegalidad» de su actividad. Alberto Baquero taxista y empresario del VTC, fue más allá al afirmar que no sólo los conductores de VTC están dentro de la legalidad sino que más bien, según sus palabras, habrían muchos casos de taxis que estarían al margen de la ley. Se refirió a manera de ejemplo al caso de Alcobendas, donde Baquero asegura que hay sólo 3 licencias de taxis pero más de 500 unidades de taxi «trabajando de manera ilegal».
Por su parte, el sindicato Comisiones Obreras ha anunciado que no tomará partido en la polémica que enfrenta al sector del taxi y los coches con licencias VTC.
CCOO afirmó que “siempre defenderá los intereses de los trabajadores de cualquiera de estos sectores”, a través de un comunicado que difundió este jueves. Además, el sindicato es crítico con la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez del conflicto entre el sector del taxi y las empresas de vehículos VTC, como Uber o Cabify. “El Gobierno se equivoca si pretende solucionar el conflicto con un único parche o decreto. Esta situación requiere varios ámbitos de actuación y una contextualización global”, sentenció CCOO en el comunicado.
“CCOO no está dispuesta a tomar partido de intereses empresariales de unos u otros, sólo a garantizar condiciones laborales decentes y modelo de servicio público. Y para eso existen pocas voluntades por parte de la patronal y parece ser que de las Administraciones”, resume la organización.
Comisiones Obreras, además, denuncia que el problema existente “es empresarial” y ha llevado a “la precarización de las condiciones de los trabajadores, secuestrados por el conflicto”. “El interés prioritario de CCOO es la defensa de los trabajadores y trabajadoras en el taxi y en los VTC”, remacha el sindicato.
Alerta que en el caso de los VTC las empresas como Uber o Cabify hacen trabajar a sus empleados “bajo la figura de falso autónomo o asalariado”. El sindicato, además, solicita cuestionar estas nuevas empresas que “se presentan formalmente como meros intermediarios entre cliente y prestador del servicio pero, en realidad, los precariza”.