La recuperación económica en 2016 dependerá de la estabilidad política

La aparición de nuevos partidos políticos y la situación generada tras las elecciones, en la que España continúa sin una formación de Gobierno está pasando factura a la situación económica, concretamente a la recuperación, que podría desacelerarse hasta ritmos inferiores al dos por ciento en 2016.

La situación podría variar significativamente el ritmo de crecimiento en función de una u otra decisión. Según el balance del año elaborado por la Federación de Autónomos (ATA), en este 2015 se crearon 500.000 nuevos puestos de trabajo y hay 50.000 autónomos más que en 2014, por lo que ha sido “el año de la recuperación de la economía real”, apunta en su informe. Además, hay que sumar el incremento de la contratación indefinida, mes a mes, por parte de los autónomos, de forma que en el año que está a punto de acabar se formalizaron 600.000 contratos de estos.

Son datos positivos que van de la mano del aumento de la confianza del consumidor, la cual roza máximos históricos; el incremento en las ventas del comercio durante 14 meses consecutivos; y el aumento del crédito.

De esta forma, “se cierra un año muy importante para el colectivo de autónomos” gracias, en parte, a las 18 medidas propuestas por ATA y que han aliviado la situación del colectivo. Entre ellas se encuentran la Tarifa Plana de 50 euros para que los nuevos autónomos contraten trabajadores sin perder la bonificación; la posibilidad de reanudar el cobro por desempleo si fracasa la empresa que se ha puesto en marcha; la tarifa plana para la contratación indefinida; o la rebaja al 15 por ciento de las retenciones a profesionales.

Sin duda alguna, 2016 ha sido un año de recuperación pero en el que la falta del acceso al crédito y la morosidad, aunque son factores que han mejorado  sus niveles, también han tenido su papel destacado. Y seguirán teniéndolo porque el acceso al crédito sigue siendo una tarea prácticamente imposible para la gran cantidad de autónomos de determinados sectores y la morosidad continúa estando muy por encima de lo que dicta la ley.

Sin embargo, si bien se sabía que las cosas iban a mejorar este año, la incertidumbre está latente para 2016. Siempre y cuando se garantice la estabilidad política, se forme Gobierno y los españoles no tengan que acudir a las urnas, las previsiones económicas continuarán siendo positivas. Pero toda acción tiene su cara y su cruz de la moneda, por lo que “en caso de no conseguirse un gobierno estable que continúe garantizando la recuperación el empleo y la recuperación económica o incluso en el caso de tener que ir a unas nuevas elecciones en primavera, el crecimiento del PIB no llegaría al 2%, la tasa del paro no bajaría en 2016 del 20% y las expectativas de creación de empleo previstas se reducirían a la mitad”, asegura Lorenzo Amor, Presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA.

Según las previsiones elaboradas por la Federación, la inflación se situará en tasas bajas para finalizar el próximo año en torno al uno por ciento y el PIB se estará en torno al 2,8 por ciento, con su correspondiente reflejo en el empleo.

Por su parte, de cumplirse las condiciones óptimas de estabilidad política el empleo crecerá a un ritmo del 2,9 por ciento y la tasa de paro se situará por debajo del 20 por ciento. En concreto, espera que se creen otros 500.000 puestos de trabajo a lo largo de 2016 y de ellos el 33 por ciento estarán bajo el paraguas de los autónomos.  Son tales las buenas perspectivas que el presidente de ATA, Lorenzo Amor, no duda en afirmar que “2016 será un año con más autónomos, más empresas y más empleo estable, siempre y cuando que haya una estabilidad política en nuestro país y no se frene en seco el tren del crecimiento y de la creación de empleo”. “Entre los retos a los que nos enfrentamos de cara al próximo año se encuentran afianzar el crecimiento económico y la recuperación del empleo consiguiendo crear empleo estable y de calidad, a pesar de encontrarnos en una economía muy estacionalizada. Pero para conseguirlo, como venimos señalando, es necesario un gobierno estable y certeza económica a futuro como claves para poder atraer la inversión que necesitamos”, apunta el presidente de ATA.