La renta per cápita de los madrileños duplica a la de los extremeños

La Memoria socioeconómica y laboral del Consejo Económico y Social (CES) constata que el dinamismo de la economía española durante 2015 se vio reflejado en el conjunto de comunidades autónomas. Mejoraron notablemente sus tasas de crecimiento respecto al año anterior, mostrando, además, un comportamiento algo más homogéneo entre ellas.

En términos generales, las regiones con una especialización productiva más centrada en los servicios relacionados con la actividad turística y la construcción, así como aquellas con una economía más abierta al exterior, fueron las que mostraron mejores resultados.

Comunidad Valenciana, Madrid y Cataluña fueron las más activas, creciendo su PIB por encima de la media nacional. Baleares y Castilla La Mancha igualaron el 3,2% del crecimiento del PIB del conjunto del Estado durante el pasado año. El resto quedó por debajo, con Cantabria, Aragón y La Rioja en los puestos de cola. No obstante, la brecha está en el rango del 3,6% del crecimiento registrado por la Comunidad Valenciana y el 2,6% de Cantabria, según se recoge en la Memoria del CES. Todas, sin excepción, registraron mayores crecimientos que en 2014.

En lo que respecta al PIB per cápita, el CES constató igualmente un crecimiento generalizado. Se debió tanto al mayor dinamismo económico como a la caída de la población en buena parte de las comunidades autónomas, al tiempo que redujo ligeramente la dispersión regional, a pesar de que las diferencias siguen siendo elevadas. Así, la renta per cápita media de la Comunidad de Madrid, la más alta de España el pasado año con 31.812 euros y un incremento del 3,4% sobre 2014, prácticamente duplica a la media de Extremadura, 16.166 euros, a pesar de que registró el pasado año un mayor crecimiento, un 4,6%.

En cuanto a la convergencia de las regiones en el contexto comunitario, los últimos datos disponibles de PIB por habitante en paridad de poder adquisitivo (PPA), referidos al año 2014, mejoraron respecto al año anterior, pero muestran un claro empeoramiento frente a 2007. En aquel año, Extremadura era la única región con un PIB per cápita inferior al 75% de la media europea, pero en 2014 fueron cinco las regiones que se situaron por debajo (Extremadura, Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Melilla). Sin embargo, a efectos de la política de cohesión comunitaria, únicamente Extremadura se considera región menos desarrollada.