Con lo que el IPC vuelve al terreno positivo y se sitúa e el 0,4%. Los motivos que esgrime Estadística son como decíamos, por la subida de los precios en Semana Santa, pero también por la estabilidad de los precios de la electricidad y el aumento de los de las gasolinas.
Por su parte, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) se situó en abril en el 0,3%, cinco décimas por encima de la tasa anual registrada en marzo (-0,2%). En tasa mensual, el IPCA subió en abril un 0,6%.
Y un apunte más. La inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, incrementó tres décimas su tasa interanual, hasta el 0,3%, una décima por debajo de la tasa general.