Mediante un informe elaborado por la Comisión Europea se exige a nuestro país más control de los poderes regionales y locales y reforzar el poder al tribunal de cuentas. El 95% de los españoles cree que la corrupción es una práctica habitual en nuestro país. Una cifra que solamente se supera en Grecia donde casi el 100% de la población ve corrupción en su entorno.
También la percepción de las empresas de nuestro país sobre la corrupción es llamativa, el 97% de las empresas (independientemente de su tamaño) han respondido afirmativamente a la pregunta de si percibe la corrupción como una práctica cotidiana.
En su informe Anticorrupción 2014, la CE hace a nuestro país recomendaciones específicas en las que destaca la financiación de los partidos políticos y su supervisión. Entre los puntos en los que hace especial hincapié se encuentra el desarrollo urbanísticio y la defectuosa normativa de compras, así como los contratos públicos. Tampoco ha pasado por alto los insuficientes controles de actuación de los poderes regionales y locales, la falta de coordinación entre las diferentes instancias de la Administración y la discrepancia entre la normativa sobre conflictos de intereses y revelación del patrimonio.
En este informe publicado hoy exige impulsar la Ley de Transparencia para garantizar el acceso a la información y consolidar el buen gobierno en el que se incluya un mecanismo de supervisión independiente de la mano de un sistema de sanciones disuasorias.