Lantania espera alcanzar este 2024 una facturación de 421 millones de euros, lo que supone un incremento del 12% respecto a la registrada en 2023, pese a no haber alcanzado en el último año ciertos objetivos estratégicos por la aportación negativa de DSV, una constructora que compró en 2022.
Según ha explicado en rueda de prensa su presidente, Federico Ávila, esta empresa especializada en mantenimiento de vía férrea y montaje de vía restó 2,1 millones de euros al resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo en 2023.
De esta forma, esta partida fue de 12,5 millones de euros, frente a los 14,4 millones que planteaba su plan estratégico, afectado también por el incremento de las materias primas y los costes laborales.
«DSV estaba en una situación muy delicada, le inyectamos fondos, pero terminar los proyectos de su etapa anterior ha tenido un impacto peor del esperado. No obstante, se está corrigiendo y los nuevos contratos vienen ya con nuestros parámetros», ha justificado Ávila.
MANTIENE PREVISIONES
Por ello, a pesar de este lastre inicial, Lantania mantiene los objetivos del plan estratégico propuestos para el año 2026, cuando espera alcanzar un Ebitda de 25 millones de euros y una facturación de 500 millones de euros. De hecho, eliminando impactos extraordinarios, el Ebitda de 2023 hubiese estado ya en 20 millones de euros.
La compañía se sustenta en los datos obtenidos en los seis primeros meses de 2024, en los que ya se detecta una mejora significativa de los resultados. En concreto, los ingresos crecieron un 8%, hasta los 172 millones de euros; el Ebitda un 33%, hasta 5,6 millones; y la contratación de nuevos proyectos un 45%, hasta 380 millones de euros.
«A pesar del contexto complicado en el que nos movemos, con el efecto de la subida de los precios de las materias primas de los últimos años, todavía presente, y la falta de mano de obra como principales obstáculos, mantenemos un crecimiento robusto que en los próximos meses estará protagonizado por la consolidación de iniciativas clave, como nuestra apuesta por el mercado de la desalación, avances en energía y la búsqueda de nuevas operaciones corporativas», ha señalado Ávila.
REDUCE UN 32% LA DEUDA
En 2023, Lantania también mejoró su balance financiero, al reducir la deuda cerca de un 32% y situarla en los 28,2 millones de euros, lo que le permite aumentar su capacidad de inversión y reducir riesgos.
Entre las principales fortalezas de su negocio, su presidente ha destacado el crecimiento de la división de Energía, que ya representa el 31% de la contratación, frente al 37% de Infraestructuras y el 11% de Servicios; y la positiva evolución de Balzola Polska, su constructora polaca, que duplicó su cifra de negocio de 2022 hasta más de 60 millones de euros.
NUEVA OPERACIÓN EN RENOVABLES
Respecto a nuevos movimientos corporativos, Ávila ha avanzado que la compañía está continuamente estudiando el mercado y se encuentra en una fase muy avanzada para entrar en una operación de renovables, que podría cerrar el próximo mes de septiembre.
En concreto, la inversión necesaria para acometer ese proyectos sería de entre unos 50 y 60 millones de euros y está valorando opciones de deuda o de equity, con la entrada de nuevos socios, o una combinación de ambas.
«Hay interés en el mercado, a pesar de la situación en la que se encuentra el sector. Ya se han acercado fondos de inversión extranjeros, algunos muy activos en renovables», ha desvelado Ávila, que también ha avanzado que podría adjudicarse nuevos contratos de desalación y depuración de aguas en Oriente Medio de más de 250 millones de euros.
