Las nueve autopistas de peaje actualmente en quiebra y que rescatará el Ministerio de Fomento redujeron una media del 2,89% su tráfico en los nueve primeros meses del año, periodo en el que contabilizaron una media de 6.160 vehículos diarios, según datos del Departamento.
A pesar de la caída media, tres de estas vías cerraron septiembre con un saldo positivo. Se trata de la AP-36 Ocaña-La Roda, que presenta un aumento del tráfico del 3,5%, la M-12 entre Madrid y el aeropuerto de Barajas (+1,5%) y la Cartagena-Vera (+2,8%).
La evolución del tráfico por estas nueve autopistas, las de más reciente construcción, contrasta con la del conjunto de la red de vías de pago, que concluyeron los nueve primeros meses con una intensidad media diaria (IMD) de 15.023 usuarios, y un crecimiento del 1,76%.
En el mes de septiembre, el tráfico de toda la red de autopistas, que suma 2.560 kilómetros, alcanzó los 16.913 coches diarios, un 0,4% más, manteniendo así la tendencia a la recuperación que muestra desde inicios de ejercicio.
En cuanto a las nueve autopistas en quiebra, las radiales de Madrid y la Madrid-Toledo siguen registrando las mayores reducciones en el tránsito de vehículos.
Entre enero y septiembre, el número medio de usuarios de la R-2 Madrid-Guadalajara disminuyó un 7,4%, hasta 4.280 véhículos al día; en la R-3 Madrid-Arganda un 5,1% (9.288 usuarios), en la R-5 Madrid-Navalcarnero un 5,6% (6.223 vehículos) y en la R-4 Madrid-Ocaña, un 3,6% (4.804 usuarios).
Asimismo, la autopista que enlaza Madrid con Toledo perdió un 5,1% de su tráfico en los nueve primeros meses, cuando contabilió una media de apenas 734 vehículos diarios. De su lado, la circunvalación de Alicante redujo el tráfico un 0,5%, hasta 5.716 usuarios.
La caída de los tráficos que se anotan desde que empezó la crisis, junto a los sobrecostes de expropiaciones que afrontaron, constituyen las causas de la situación que atraviesan estas vías, todas ellas en concurso de acreedores.