Las industrias de contenidos piden al nuevo ministro de Cultura “una tutela firme, proactiva y apasionada”

La Coalición de creadores e industrias de contenidos pide al nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, un ejercicio comprometido de la responsabilidad que acaba de asumir, ejerciendo una tutela firme, proactiva y apasionada del sector cultural. Las industrias de contenidos esperan que se aplique a ello desplegando la capacidad para el diálogo y la habilidad negociadora que en buena medida han caracterizado su impecable trayectoria profesional.

La Coalición considera fundamental que, como especialista en derecho europeo y constitucional, materias de las que ha dado clases en distintas universidades, y bregado en negociaciones de alto nivel, Íñigo Méndez de Vigo dé un impulso renovado al Ministerio en la lucha contra la piratería digital, y facilite la comunicación con las industrias culturales y de contenidos, así como una mayor y mejor predisposición para buscar soluciones, defender y apoyar a este sector estratégico.

“No podemos dejar de insistir en la necesidad de proteger a un sector clave que, según datos del propio Gobierno, facilita 458.000 empleos, un 2,6 por ciento del total en España, y supone el 3,5 por ciento del PIB”, los resultados en la lucha contra la piratería son urgentes” señala Carlota Navarrete Barreiro, directora de la Coalición.

”José Ignacio Wert ha sido ministro de Educación pero no de Cultura. Llegó y dijo que era «uno de los nuestros», pero no ha sido capaz de cumplir ninguno de los compromisos que adquirió ni de satisfacer las expectativas que había generado en el sector. Su legado es una reforma parcial de la Ley de Propiedad Intelectual con fecha de caducidad en un año y completamente ajena a las necesidades urgentes del sector”, añade la directora de la Coalición.

El Observatorio de la piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales 2014 constató que el 87,94 por ciento de todos los contenidos digitales consumidos en España en 2014 fueron piratas, lo que produjo a las industrias culturales y de contenidos un lucro cesante de 1.700 millones de euros. No podemos olvidar que un escenario sin piratería permitiría crear 29.360 nuevos puestos de trabajo directos, y unos ciento cincuenta mil empleos indirectos, y que a causa de la piratería las arcas públicas dejaron de recibir casi 628 millones de euros entre IVA, IRPF y cotizaciones a la Seguridad Social.