Las pensiones elevan el déficit de de los Fondos de Seguridad Social más de un 76%

Pese al incremento del 1,8 por ciento, la recaudación por cotizaciones sociales no puede con los más de 130.500 millones de euros de gasto en prestaciones

La vorágine política está restando protagonismo al día día de la economía y datos como los que ayer mismo publicaba el Ministerio de Hacienda y Administraciones públicas pasan sin pena ni gloria, acallados por yermos debates sobre cómo se sentarán los diputados en la Cámara Baja.

Vamos al grano. Los Fondos de la Seguridad Social aumentaron su déficit un 76,02 por ciento interanual hasta finales del mes de noviembre. Ésto, en números redondos, significa un montante de 2.298 millones de euros, y en términos de PIB un 0,28 por ciento (0,21 puntos más que en 2014). Así, la diferencia entre las cuentas del mes de noviembre de 2014-cuando se registró un negativo de -719 millones de euros- y las del mismo mes del casi olvidado 2015 asciende a 2.959 millones de euros. 

El desfase podría haber sido mayor de no haberse producido un descenso del 0,5 por ciento en el apartado de gastos, ya que, según se explica en el Informe de ejecución presupuestaria elaborado por el negociado que lidera en funciones Cristóbal Montoro, los ingresos cayeron a un ritmo del 2,2 por ciento.

En el caso de las entradas en caja o recursos no financieros se sumaron un total de 134.862 millones de euros, casi tres mil millones menos que en 2014 (-2,2 por ciento), y eso pese al aumento del 1,8 por ciento de la recaudación por cotizaciones sociales que sumó 110.742 millones de euros.

Además, de los casi 4.600 millones de euros de menos en las transferencias del resto de las Administraciones Públicas, las cuentas se vieron perjudicadas por la pérdida de casi 369 millones de euros de intereses que se dejaron de percibir por la merma del Fondo de Reserva.

En el apartado de ingresos aparte de los 130.573 millones de euros -en el acumulado- que se destinaron al pago de prestaciones (casi 700 menos que en 2014) destacan el aumento del 1,1 por ciento (2.240 millones de euros) en concepto de «remuneración de asalariados», achacable, entre otras cuestiones, a la devolución de la paga extra de los funcionarios, y el del 11 por ciento en subvenciones.

Casi 3.000 millones de diferencia

La consecuencia inmediata de este nuevo revés se traslada al conjunto del Sistema que incrementó la línea de déficit un 50,4 por ciento o lo que en términos absolutos se traduce de 8.831 millones de euros (0,82 por ciento del PIB), frente al negativo de 5.872 millones de 2014. Es decir, en tan sólo 2.959 millones de euros de diferencia.

Si bien la buena noticia estaría en el incremento del 1,3 por ciento de los ingresos por cotizaciones sociales debido al 3,2 por ciento de subida en el total de afiliados, los 92.194 millones que se sumaron a las arcas no son suficientes para cubrir un gasto que alcanzó  los 115.625 millones de euros, habiendo aumentado, además, un 3,3 por ciento con respecto a noviembre de 2.014.

Las cuentas vienen marcadas a fuego por el incremento del gasto en pensiones tanto contributivas como no contributivas que costaron al Sistema un total de 110.584 millones (+3,4 por ciento), representado así más del 95 por ciento de las salidas de caja.

Cabe recordar en este punto que anteayer se conocía que la Seguridad destinó, el pasado uno de enero, 8.384 millones de euros al pago de las pensiones contributivas, de los cuales más de la mitad (5,69 millones) se correspondieron con jubilación.

Sepe y Fogasa

Otro de los organismos que gasta más de lo que ingresa es el Fogasa (Fondo de Garantía Salarial) que con un 93,2 por ciento de incremento cerró el pasado noviembre con un negativo de 199 millones de euros. Ahora bien, según se explica en el informe de Ejecución «esta situación es de carácter transitorio» debido a los adelantos de 2014.

El Sepe (Servicio Público de Empleo Estatal) es el único que arroja resultados positivos, elevando su superávit un 14,8 por ciento, lo que se debe no tanto al aumento del 10 por ciento en los ingresos sino al tijeretazo del 15,2 por ciento en los gastos.