La suerte con las urnas está echada. En Edimburgo, los escoceses comenzaban a depositar su voto para decidir si el país debería seguir perteneciendo a Reino Unido u optar por la secesión. Los participantes en el referendum comenzaban a llegar a las 6 de la mañana, tan pronto como se abrieron las puertas de los colegios electorales y los ayuntamientos del país.
Van a votar si siguen con Londres y la corona de la Reina Isabel II o por el contrario cortan de raíz una relación de 3 siglos. Según los sondeos el no va ganando al sí, pero sólo son eso, estimaciones de voto que pueden equivocarse, sobre todo, teniendo en cuenta que hay muy poca distancia entre ambas posturas.
De hecho, según ha recogido Reuters, a las puertas de los colegios había confrontación de opiniones. Un empresario que salía de votar ha expresado su alegría por poder defender la secesión de su país de Inglaterra, diciendo que había esperado toda la vida para esto, «es un día histórico». Mientras hablada cerca algunos trabajadores gritaban su negativa a votar a favor de la independencia.
La medición publicada el miércoles por la noche por el diario escocés ‘Daily Record’ es la que concede una mayor ventaja a ‘Better Together’, que obtendría un 53 por ciento, frente al 47 por ciento que conseguiría ‘Yes Scotland’. Los indecisos representarían el nueve por ciento.