Bajo el paraguas del pleno rendimiento, con una elevada capacidad operativa que ha situado el nivel de actividad del Grupo en máximos históricos, la Junta General de Accionistas de Inmobiliaria del Sur (Insur) ha aprobado las cuentas de 2023 con un incremento en la cifra de negocio del 1,6 por ciento hasta alcanzar los 119,8 millones de euros y un Ebitda de 31,5 millones, un 35,6 por ciento más que en 2022. Un aumento del negocio que no solo certifica la fortaleza de una compañía que roza los 80 años de historia, sino que podría haber alcanzado los 140 millones si se hubiese producido la entrega de dos promociones ya culminadas en la Comunidad de Madrid que, por problemas administrativos, se retrasó al pasado febrero.
Los accionistas de Grupo Insur, reunidos este jueves, tanto de manera presencial en Sevilla como de manera telemática, han aprobado las cuentas de 2023, el reparto de dividendos y la reelección de Ricardo Pumar, actual presidente del Consejo, como consejero ejecutivo por un nuevo periodo de cuatro años.
Asimismo, han designado como nuevo auditor de cuentas a la firma KPMG Auditores y nombrado a dos nuevos consejeros, uno independiente en la persona de María Luisa García García y otro dominical en la persona de Guillermo Pumar Ortiz.
Grupo Insur, que mejoró su Ebitda en 2023 presenta una elevada capacidad operativa con un total de doce promociones en construcción, que suman un total de 1.137 viviendas y tres edificios terciarios de oficinas con una edificabilidad total de 29.400 metros cuadrados.
Cabe destacar que, durante 2023, la entidad realizó un importante esfuerzo inversor. En total, destinó 13,5 millones a la adquisición de nuevos suelos y cuatro millones en capex de la actividad patrimonial a reformas y adecuación de activos. Junto a estos montantes, Grupo Insur invirtió también el pasado ejercicio un total de 77,3 millones a las ejecuciones de obra de las promociones en desarrollo.
El Grupo mantiene su capacidad de generar valor y, por ello, el Net Asset Value (NAV) se ha incrementado en 5,1 millones de euros, situándose a finales del ejercicio en los 352,5 millones, a pesar del ajuste del valor razonable de las inversiones inmobiliarias del ejercicio, «como consecuencia de las mayores tasas a las que se descuentan los flujos de caja de los distintos activos», según han explicado los responsables de la entidad durante la Junta General de Accionistas.
Desde el punto de vista financiero y a pesar de las fuertes inversiones realizadas durante el pasado ejercicio, tanto en compra de suelo como capex de activos patrimoniales y ejecuciones de obra en la actividad de promoción, la deuda financiera neta tan solo ha aumentado en un 1,5%.
El desarrollo de nuevas promociones, tanto residenciales como terciarias, y su impacto en la deuda financiera se ha compensado con las ventas en 2023 de activos patrimoniales no estratégicos. Sin embargo, «si hubiera tenido lugar la entrega durante el pasado ejercicio de las dos promociones de Madrid, con un impacto superior a 20 millones en la deuda financiera, ésta se habría reducido en un siete por ciento», ha especificado el consejero ejecutivo de Grupo Insur.
Asimismo, para hacer frente a los cambios financieros producidos en los últimos tiempos y la elevada incertidumbre geopolítica, el Consejo de Grupo Insur tomó decisiones para desarrollar la actividad de promoción en mayor medida a través de joint ventures, con el objetivo de profundizar en la mejora de la rentabilidad, diversificación de riesgos y control de la deuda, parámetros que, según han explicado, «mejorarán sensiblemente al finalizar el actual Plan Estratégico, vigente hasta 2025, con la importante cifra de negocios que tenemos previsto registrar».
En este sentido, el consejero ejecutivo de Grupo Insur ha subrayado que, «a pesar del retraso en el desarrollo de algunos proyectos por el súbito cambio de circunstancias, seguimos confiados en el cumplimiento en líneas generales de las cifras y objetivos de nuestro plan estratégico y esperamos se hagan realidad en sus dos últimos ejercicios, este año y el próximo». «Conforme se vayan materializando estas previsiones comenzará a reducirse la brecha existente entre el valor de la empresa y la cotización».
Asimismo, ha remarcado el compromiso del Equipo Directivo hacia los accionistas porque, «a pesar de la incertidumbre reinante, hemos propuesto a esta Junta un reparto de dividendos con cargo a los resultados del ejercicio 2023 de 0,29 euros por acción, un 9,4 por ciento menos que los repartidos con cargo a los resultados de 2022, en consonancia con un menor beneficio después de impuestos».
ELEVADO COMPROMISO CON LA SOSTENIBILIDAD
Durante el pasado ejercicio Grupo Insur ratificó su compromiso con la sostenibilidad en todas sus áreas. De esta forma, el esfuerzo del grupo por implementar los máximos parámetros en sus diversas áreas de actividad ha quedado acreditado con la aprobación del Plan Estratégico de Sostenibilidad/ESG para el período 2023/2025 donde se fijan unos objetivos muy ambiciosos.
En este sentido, durante 2023 Grupo Insur ha evaluado su desempeño en sostenibilidad, obteniendo un Rating ESG con calificación ‘AA’ (79/100), desempeño ‘Muy Elevado’, certificación emitida por Lighthouse (Instituto Español de Analistas Financieros) con una metodología basada en los estándares más exigentes del mercado en la actualidad.
PROBLEMAS DEL MERCADO DE LA VIVIENDA EN ESPAÑA
Pumar ha destacado en su intervención ante los accionistas que, «el mercado de la vivienda en España padece desde hace años un grave problema; la escasez de oferta, que es urgente solucionar, sobre todo si como se espera se inicia un proceso de reducción de los tipos de interés que convierta la necesidad de vivienda en demanda efectiva».
«Como causas de este grave problema hay que citar, de un lado, la escasez de suelo finalista, la lentitud de las Administraciones en la tramitación de las licencias y autorizaciones urbanísticas y la incertidumbre regulatoria, sobre todo en materia de alquileres», ha explicado.
Por otro lado, ha señalado a «la escasez de mano de obra y servicios de construcción, el incremento de los costes, la elevada carga impositiva que sufre la promoción de vivienda y, recientemente, la subida de los tipos de interés como claves para que se reduzca el margen del promotor y se desincentive con ello la promoción».
No obstante, el consejero ejecutivo de Grupo Insur ha matizado que «esta situación puede resultar beneficiosa para empresas promotoras consolidadas y, sobre todo, para Grupo Insur» por «la elevada capacidad de ejecución que proporciona nuestro modelo de integración vertical, con una actividad de construcción al servicio de la promoción, que permite superar de mejor manera los problemas de escasez de mano de obra y de servicios de construcción».
Pumar ha lanzado un mensaje de optimismo de cara al futuro, reiterando que «nos encontramos en unas condiciones inmejorables para aprovechar la recuperación del mercado y mejorar la rentabilidad, con la confianza y convencimiento claros del cumplimiento de los objetivos del plan estratégico; sustentados siempre en la calidad y compromiso de nuestro equipo humano, clave de nuestro buen desempeño a lo largo de nuestra dilatada historia».