Los bancos europeos no tendrán que contribuir en 2024 al Fondo Único Resolución (FUR), después de que los medios financieros del mecanismo alcanzasen al cierre del año pasado los 78.000 millones de euros, alcanzando así el nivel objetivo de al menos el 1% de los depósitos garantizados mantenidos en los Estados miembros que participan en el mismo.
De tal modo, la Junta Única de Resolución (JUR) ha anunciado que en 2024 no se recaudarán las contribuciones anuales regulares de las instituciones incluidas en el ámbito del FUR, añadiendo que sólo se recaudarán estas contribuciones en caso de circunstancias específicas o acciones de resolución que impliquen el uso del FUR.
«En 2024 no recaudaremos contribuciones de los bancos, a menos que se utilicen para respaldar una resolución efectiva a lo largo del año», ha indicado el presidente de la JUR, Dominique Laboureix, para quien alcanzar este objetivo proporciona un fondo anticrisis sustancial para utilizar en caso de ser necesario.
Asimismo, la institución ha señalado que, en circunstancias normales, realizará cada año un ejercicio de verificación para confirmar que los medios financieros disponibles en el FUR representan al menos el 1% del importe de los depósitos cubiertos de todas las entidades de crédito autorizadas en los Estados miembros participantes.
En este sentido, siempre que el resultado de dicho ejercicio así lo prescribiera, la JUR reiniciará la recaudación periódica de contribuciones de la banca al FUR e informaría al sector en consecuencia.
Para establecer el nivel objetivo a 31 de diciembre de 2023, la JUR recopiló datos sobre los depósitos cubiertos de los sistemas de garantía de depósitos. Según la información disponible, el importe de los depósitos garantizados mantenidos a 31 de diciembre de 2023 en los Estados miembros participantes ascendía a 7,5 billones de euros, por lo que el nivel objetivo a 31 de diciembre de 2023 ascendía a aproximadamente a 75.000 millones de euros.
Como siguiente paso, la JUR cuantificó el importe de los medios financieros disponibles en el FUR a 31 de diciembre de 2023, representados por saldos de efectivo, activos y compromisos de pago irrevocables, ascendieron a aproximadamente 78.000 millones de euros, incluyendo el rendimiento acumulado de la compra de los valores y todos los intereses adeudados, así como las ganancias y pérdidas obtenidas por la enajenación de los valores.
Los fondos del FUR, recaudados hasta ahora a través de las autoridades nacionales de resolución, se destinarán a la resolución de entidades financieras en determinadas circunstancias y estaba previsto que su dotación iría incrementándose durante un periodo de transición de ocho años (2016-2023), hasta alcanzar al menos el 1% de los depósitos cubiertos de los Estados miembros que integran el Mecanismo Único de Resolución (MUR).
Las entidades participantes han debido de realizar estos años contribuciones ex ante con carácter anual al FUR que se calculaban sobre la base general de los pasivos de las instituciones, excluyendo los fondos propios y los depósitos cubiertos. Esta base general era posteriormente ajustada en función del perfil de riesgo de cada entidad.