Los bonos convertibles han centrado el debate tras la intervención de los ejecutivos de Banco Popular. Distintos accionistas han mostrado su descontento con los gestores de la entidad tras no haber puesto solución en las juntas anteriores a los problemas que planteaban en relación a los bonos.

Estos bonos, necesariamente convertibles en acciones, vencen en noviembre. Por ello, los accionistas han reiterado en varias ocasiones la posibilidad de que se prorroguen esos bonos, dado que el valor de las acciones es más bajo. Así, si no se toman medidas, ello supondrá una importante pérdida económica para los accionistas respecto a su inversión inicial.

Desde la gestión del Banco Popular, Ron ha matizado que están tratando de buscar soluciones favorables para los bonistas, pero que han de combinarlo con los intereses de sus accionistas. Además, ha subrayado que la entidad ha hecho todo lo posible por mejorar la rentabilidad de los mismos, que este año han dejado una remuneración del 7 por ciento anual. Sin embargo, es algo que sigue sin convencer a los accionistas.

Asunción Infante