Los fabricantes de automóviles europeos cedían este martes en Bolsa tras la apertura de la sesión bursátil después de las promesas de las últimas horas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles de hasta el 25% a las importaciones de Canadá y México y del 10% extra a las chinas para frenar la inmigración y la entrada de drogas en el país.
El grupo dirigido por el portugués Carlos Tavares, Stellantis, lideraba las caídas al perder los 12,56 euros por acción con un retroceso superior al 4%, mientras que Volkswagen, expuesto en menor medida a su negocio en América del Norte, registraba un movimiento a la baja de más del 2,1%, hasta los 80,62 euros por título.
En el caso de Renault, el fabricante que dirige Luca de Meo protagonizaba el tono negativo del índice CAC 40 a pesar de mantener una cotización estable sobre los 39,82 euros por acción. En el segmento de lujo, Porsche se dejaba un 2,1% en la Bolsa de Valores de Frankfurt tras caer por debajo de los 58 euros por título, mientras que BMW cedía también más de un 2%, cotizando en los 68,42 euros por acción a las 10.21 horas.
Por su parte, el índice que agrupa a las automovilísticas y proveedores europeos, el Stoxx Europe 600 Automobiles & Parts, se dejaba un 2,2%, hasta los 525,65 puntos.
Estos movimientos del sector automovilístico a la baja en los mercados son consecuencia de las amenazas de Trump de que impondrá desde el día uno de su segunda presidencia aranceles a las importaciones procedentes del resto de países norteamericanos y China. Así lo ha asegurado en la red social Truth Social a poco menos de dos meses de la toma de posesión del cargo el próximo 20 de enero.
«El 20 de enero, como una de mis muchas primeras órdenes ejecutivas, firmaré todos los documentos necesarios para cobrar a México y Canadá un arancel del 25% sobre todos los productos que entren a Estados Unidos y sus ridículas fronteras abiertas. ¡Este arancel permanecerá en efecto hasta que las drogas, particularmente el fentanilo, y todos los extranjeros ilegales detengan esta invasión a nuestro país!», aseguraba el republicano hace unas horas en un mensaje.
A continuación, en otra publicación se ha referido a China con quien, dice, se han mantenido «muchas conversaciones» para frenar el tráfico de drogas, especialmente, el fentanilo a Estados Unidos, pero «han sido en vano».
«Me dijeron que impondrían su pena máxima, la pena de muerte, a cualquier traficante de drogas que fuera sorprendido, pero, por desgracia, nunca lo hicieron, y las drogas están entrando en nuestro país, principalmente a través de México, a niveles nunca antes vistos», ha puntualizado, para añadir que, hasta que no se detenga esta presunta práctica cometida por China «cobraremos un arancel adicional del 10%, por encima de cualquier otro arancel, sobre todos sus productos».
A cierre de 2023, las importaciones procedentes de China supusieron el 16,5% del total sobre todos los productos que entraron en Estados Unidos en el año, México el 13,61% y Canadá el 13,21%.
En el caso de la Unión Europea, el conjunto de países comunitarios representan el 13% de las importaciones estadounidenses y, aunque por el momento el republicano no ha amenazado directamente a Bruselas con nuevos aranceles, los inversores no descartan que los 27 sean el próximo objetivo del político republicano.