El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, puso este sábado como ejemplo la “cultura del pacto” en el País Vasco para mostrar su confianza en que “a la mayor brevedad” se puedan aprobar unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) que surjan del consenso entre distintos partidos políticos para hacer frente a los estragos económicos y sociales causados por la pandemia del coronavirus.
Lo dijo en declaraciones a los periodistas tras asistir en la Casa de Juntas de Gernika (Vizcaya) al acto de toma de posesión de Iñigo Urkullu como lehendakari, en las que trasladó a éste la felicitación del Gobierno y de su presidente, Pedro Sánchez, por este hito.
Tras evocar a la Casa de Juntas como “símbolo de tantas y tantas cosas, símbolo de tantos acuerdos y de la cultura vasca”, consideró “importante y relevante” poner de manifiesto que la “política del acuerdo” entre “sensibilidades políticas distintas” es el “camino preciso y necesario en momentos difíciles”.
Por ello, utilizó el acuerdo de coalición recién alcanzado entre el PNV y el PSE como ejemplo para que “a la mayor brevedad” los partidos políticos de ámbito nacional sean capaces de aprobar unos PGE que sirvan para amortiguar los efectos de la crisis económica provocada por la pandemia.
“La cultura del pacto es el único camino posible y factible”, remachó.
Por su parte, la líder de los socialistas vascos y próxima vicepresidenta segunda y consejera de Empleo en el Gobierno que tomará posesión el martes, destacó la importancia de que se haya alcanzado un “acuerdo plural” para gobernar en el País Vasco.
Destacó la “mano tendida al diálogo” del Gobierno con los agentes sociales y económicos y con los distintos grupos parlamentarios en aras a “entre todos acertar con las políticas adecuadas”.
“Son tiempos de cooperación, de colaboración, de trabajar todos juntos para entre todos sacar adelante la situación generada por el coronavirus”, concluyó.