Más de la mitad de las facturas se pagaron con retraso hasta marzo

El 55,7% de las facturas en España se pagaron con retraso en el primer trimestre del año y el periodo medio de pago (PMP) registró su alza más elevada de los últimos cuatro años, al subir en 0,9 días, hasta los 84,3 días, según el último ‘Observatorio de Morosidad’ elaborado por Cepyme.

«La evolución de la inflación y de los tipos de interés condicionan este alargamiento de los plazos de pago», aseguran desde Cepyme, a la vez que recuerdan que el PMP inició una fase descendente al comienzo de la pandemia, pero, tras el incremento de entre enero y marzo de 2024, suma tres trimestres consecutivos sin anotar descensos.

Todos los sectores registraron aumentos del PMP y la brecha territorial subió a 56,1 días entre la autonomía con el PMP más bajo, que fue Castilla y León (69,3 días), y la que depara mayor demora en los pagos, que fue Navarra, con 125,4 días.

Sin embargo, la evolución fue variable según tamaño de empresa, oscilando el PMP entre los 89,5 días en las microempresas y los 83,2 en las medianas. El plazo subió en todos los segmentos, salvo en el de grandes empresas, donde se redujo en 3,3 días.

Según Cepyme, los datos evidencian la falta de efectividad de la Ley de Morosidad española, que fija el plazo máximo legal de pago en los 60 días.

Por ello, la patronal de la pequeña y media empresa ha urgido a las instituciones europeas a agilizar la aprobación de la nueva normativa comunitaria sobre morosidad e insta al Consejo de Competitividad de la UE a que opte por la vía del reglamento, en lugar de la directiva, con el fin de homogeneizar más efectivamente las diferentes normas nacionales.

EL 44,3% DE LAS FACTURAS SE PAGÓ DE MANERA PUNTUAL

El 44,3% de las facturas se pagó de forma puntual en el primer trimestre del año, frente al 55,7% que se hace con retraso, según datos de Cepyme, que muestran también que el 46,1% de facturas se paga hasta 30 días después del vencimiento y el 9,7% a más de 30 días de lo convenido.

Por segmentos, se constata que cuanto menor es el tamaño de la empresa mayor tiende a ser el porcentaje de facturas pagadas de forma puntual, aunque también es mayor la proporción abonada a más de 30 días del vencimiento.

Pese al aumento del PMP, la proporción de pagos puntuales aumentó hasta el 31,5% del importe total facturado, lo que supone 3,6 puntos porcentuales más que un año antes y la quinta mejora interanual consecutiva.

De este modo, la proporción de pagos puntuales se mantuvo por encima del 31% por segundo trimestre consecutivo, hecho que no ocurría desde 2015.

La suma de pagos puntuales y pagos hasta en 30 días alcanzó el 96,6% del total, aunque los pagos a más de 90 días después del vencimiento suman cuatro trimestres consecutivos creciendo, situándose en el 1,3%.

EL ESFUERZO FINANCIERO ALCANZÓ EL DATO MÁS ALTO DESDE 2009

El esfuerzo financiero de las pymes vinculado a la deuda comercial encadena 12 trimestres consecutivos de crecimiento, llegando en el primer trimestre de este año a los 2.930 millones de euros anualizados, el dato más alto desde septiembre de 2009 y un 24,5% superior que un año antes.

Pese a que el ritmo de incremento se modera, lo cierto es que el esfuerzo financiero ha subido un 128% desde el primer trimestre de 2021 al mismo periodo de este ejercicio. Un 86% de este aumento obedece al aumento de los tipos de interés y, el resto, al mayor volumen de la deuda comercial, que aumentó un 18% en ese periodo.

De esta manera, 1.440 millones corresponden a la parte de la deuda comercial pagada en los tiempos acordados, un 26,1% más en tasa interanual, y 1.490 millones (+23%) corresponden al tramo de las facturas pagadas fuera de plazo.

Por tamaños de empresas, las empresas pequeñas sufrieron un esfuerzo financiero mayor que las medianas empresas. Así, alcanzó los 890 millones de euros para las firmas pequeñas, un 29% más respecto al mismo periodo del año anterior, y 550 millones para las medianas (+21,8%).

El esfuerzo financiero anualizado vinculado al tramo moroso de la misma fue de 950 millones para las empresas pequeñas (+28,1%) y 540 millones para las medianas (+14,9%).

LA DEUDA COMERCIAL SE SITÚA SOBRE LOS 175.000 millones

Por su parte, la deuda comercial del conjunto de las pymes se sitúo en el entorno de los 175.000 millones de euros en el primer trimestre, de los cuales 68.000 millones corresponden a firmas medianas y los restantes 107.000 millones a las pequeñas.

Además, si se observa el esfuerzo financiero tanto como proporción de las ventas interiores de las pymes, como del Producto Interior Bruto (PIB), se aprecia un marcado incremento desde mediados de 2022.

En el primer trimestre de este año, el esfuerzo financiero anualizado vinculado con la deuda comercial equivalió al 0,25% de las ventas del periodo, la mayor proporción desde junio de 2014.

En relación al PIB, el esfuerzo financiero alcanzó el 0,35% del PIB del periodo, el mayor registro desde junio de 2012. El promedio de los cinco años anteriores a la pandemia fue del 0,21% del PIB, lo que demuestra que el dato del primer trimestre supone «un golpe adicional a la estabilidad de las pymes», según Cepyme.

Por otro lado, el índice de morosidad en las facturas de ventas a plazo (Imfvp) fue de 46,9 puntos, un 8,4% inferior al de un año antes y el nivel más bajo en un año y medio.

De esta manera, el Imfvp disminuyó en las empresas pequeñas (- 19,7%) y medianas (-17,5%), pero subió en las micro (+24,3%) y en las grandes empresas se multiplicó casi por 12.