El Ibex 35 ha registrado su segunda mayor caída anual y ha cedido un 3,59%, hasta los 9.838 enteros, lo que lleva al selectivo a situarse en niveles de marzo. En el mercado de deuda, la prima de riesgo se ha colocado en 134,9 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 2,105%.
El selectivo español inició la jornada en negativo y pasadas las 15.30 horas ha llegado a desplomarse más de un 4% por la suma de una serie de factores que también han afectado a las principales plazas europeas.
Antes del cierre de sesión, las caídas se han moderado, de modo que al desplome del 3,59% del Ibex se han unido el retroceso del 3,6% de París, del 2,75% en Francfort y del 2,7% en Londres. En el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,2771 ‘billetes verdes’.
Abengoa ha resultado ser el valor más perjudicado en la sesión de este miércoles, con un recorte del 8%, seguido de OHL (-6,7%), Gamesa (-6,4%), Caixabank (-5,5%) y Popular (-5,4%).
Los ‘blue chips’ tampoco han conseguido aguantar el tipo y han cerrado con pérdidas superiores al 4%, liderados por Repsol y Santander. BBVA ha cedido un 3,4%, Telefónica un 3,1%, Inditex un 2,8% e Iberdrola un 2,3%.
DATOS MACRO Y RUMORES
El analista de XTB Jaime Díez ha recordado que las bolsas han alcanzado hoy «la velocidad punta» de la caída después de llevar varios días a la baja. Entre los factores que han generado esta racha pesimista se encuentran los malos datos macro en EE.UU. y la pérdida de sus soportes relevantes, a lo que se ha añadido una serie de rumores acerca del ébola, los test de estrés europeos y la posible insolvencia de los bancos griegos.
«El Ibex apenas aguantaba el soporte de 9.950 enteros para caer 200 puntos más desde ese nivel en menos de una hora. El momento crítico lastró a todas bolsas y nos dejó caídas en algunos valores superiores al 5%», ha indicado el experto a Europa Press.
Díez ha afirmado que a pesar de la extrema sobreventa, similar al pico de caídas de agosto, los inversores han continuado con las ventas. «Los indicadores de sentimiento y volatilidad están en momentos críticos, donde el pánico es lo único que ven los inversores», ha dicho.
Desde su punto de vista, los índices rebotarán los próximos días fruto de este extremo pesimismo y de la gran sobreventa, y los 9.700 enteros en los que se ha situado hoy el selectivo pueden ser una parada previa a dicho rebote.
POSIBLE REBOTE
Por su parte, el analista de IG Daniel Pingarrón ha indicado que la tendencia bajista nacida desde los máximos anuales el pasado 19 de septiembre ha tenido como hilo conductor principal el miedo de los inversores al enfriamiento económico de la Eurozona y la falta de expectativas de que se apliquen medidas fiscales o monetarias para relanzar el crecimiento de manera efectiva.
A su juicio, la publicación de los malos datos macroeconómicos en EE.UU., la aparición de un segundo caso de ébola en Dallas y el temor a que Grecia abandone el programa de asistencia financiera han hecho tambalearse a los mercados.
Pero lo más relevante en el día de hoy, desde su punto de vista, reside en la pérdida de niveles técnicos que llevaban asociados órdenes de venta adicionales (‘stop loss’) en Wall Street, «lo que ha incrementado el volumen de oferta sobre el de demanda, incrementando las caídas».
«Así pues, el escenario, ya complicado, adquiere tintes dramáticos. El principal motivo para la esperanza está en la fuerte sobreventa actual, fruto de una de las mayores correcciones de la tendencia alcista principal de las bolsas. Pero la sobreponderación de temores que tenemos en estos momentos no desaparecerá hasta que haya novedades importantes en el capítulo de expectativas macroeconómicas que modifiquen el pesimismo actual», ha dicho.
Así, ha explicado que si Wall Street consigue cerrar lejos de los mínimos registrados este miércoles mañana se podría producir «un claro rebote» en las bolsas europeas, pero para que esto se convierta en una vuelta a la tendencia alcista sería necesario atisbar un descenso de la volatilidad y la superación de niveles perdidos. «Estamos a las puertas de más caídas de importancia o ante un fuerte rebote», ha augurado.