El tenista español Rafa Nadal subió el nivel para eliminar (7-6(3), 7-6(5)) al estadounidense Reilly Opelka y alcanzar los cuartos de final en el torneo de Indian Wells, primer Masters 1.000 de la temporada, donde se medirá con el australiano Nick Kyrgios.

El campeón de 21 ‘Grand Slams’ mejoró sus prestaciones esta semana en el desierto californiano para apuntarse su tercer partido este miércoles ante un rival muy enchufado. Un 18-0 en lo que va de 2022, con tres títulos, que no peligró ante Opelka a pesar de una pequeña desconexión en el segundo cuarto. Kyrgios, que avanzó con la retirada de Jannik Sinner, será otro duro escollo.

Nadal gozó de un buen saque y al resto fue adivinando los cañonazos del jugador local. Opelka no fue solo servicio, sino que aguantó en el intercambio de golpes con una derecha demoledora y la confianza de un 2022 también sobresaliente –una semifinal y dos finales recientes, campeón en Dallas–.

El balear tuvo que trabajar ambos parciales, ya que el americano, aunque comenzó fallando, entró en calor. Nadal inició ganando sus saques con más tranquilidad que su rival. Pese a los ataques del español, Opelka sobrevivió a cada prueba, incluso en la bola de ‘break’ que levantó en el séptimo juego, sin regalar nada ambos.

El desempate en el ‘tie-break’ se antojaba inevitable y llegado ese momento, siguió igualado hasta dos buenos restos de Nadal con los que dejó atado el set. El tres veces campeón de Indian Wells subió el nivel pero el americano siguió respondiendo cual muro.

El partido no bajaba y encima a Nadal le llegaba un momento de dudas, con ciertos gestos señalando el pie izquierdo que le hizo perderse la segunda mitad de la pasada campaña. Opelka salvó una bola de ‘break’ y después aprovechó la suya, pero Nadal aguantó una vez más ante la adversidad –solo este año van varias–.

El de Manacor salvó tres bolas de 3-5 y a continuación recuperó la desventaja. Pese al palo, el estadounidense, de 2,11 metros, mantuvo su acierto en los puntos largos y apretó a Nadal hasta otro ‘tie-break’. Ahí volvió a ser mejor el tenista español, camaleónico para responder a otro partido exigente en el desierto californiano.