La Fiscalía de la Audiencia Nacional le pidió ayer que no permitiera la movilización y recordaba que Herrira fue suspendida de actividades el pasado mes de septiembre durante dos años por su subordinación a la organización terrorista. El juez Velasco indica en un auto hecho público este viernes, que la manifestación ha sido convocada con mucha antelación por Herrira con la intención de burlar la suspensión que pesa en su contra.

La Asociación Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y Dignidad y Justicia solicitaron que se impidiera la celebración de la manifestación, convocada con el objetivo de reivindicar los derechos de los presos etarras y en protesta por la dispersión y la vulneración de los derechos humanos.

El juez Pablo Ruz había rechazado esta misma mañana prohibir la manifestación, como le había pedido la Fiscalía, al considerar que, con los elementos de los que él disponía (informes policiales), no se podía concluir que la celebración de este acto supusiera un delito de enaltecimiento del terrorismo.

No obstante, remitió las actuaciones a Velasco para que él tomara la última decisión sobre si la marcha debía ser vetada, puesto que es el instructor de la causa abierta contra Herrira, organización suspendida cautelarmente de actividades por este juez por su subordinación a ETA.

El acto de mañana, según han informado sus organizadores en un comunicado, no iba a ser una manifestación, sino "una intervención ciudadana con forma de mar", cuyo "punto álgido" llegaría en torno a las 18.30 horas al centro de la capital vizcaína, cuando iban a confluir las dos marchas que había convocadas.