El Parlamento alemán ha dicho sí a la ampliación del fondo de rescate. Lo ha hecho con 503 votos a favor y 89 en contra y tras un acalorado discurso por parte de Merkel, en el que ha reconocido que la situación de la Eurozona es extrema y que la recuperación tardará mucho en llegar. Tras este respaldo político, Merkel viaja con el sí de su cámara a Bruselas donde liderará la cumbre europea que busca atajar de una vez por todas el problema de la crisis de deuda soberana. De pactarse lo inicialmente hablado, ese fondo europeo de estabilidad financiera estará dotado con más de un billón de euros y servirá para garantizar la estabilidad financiera. No obstante Merkel deberá lidiar con los partidarios, entre ellos, España, de que el BCE siga comprando deuda pública de países con problemas.