Alemania no parecer tener totalmente definida su postura sobre este asunto. Si en los últimos días había afirmado que habría retrasos en el calendario de creación de una unión bancaria, que según lo acordado debería aprobarse a finales de año, hoy suscribe un documento en el que se insta a respetar esa agenda.
El ministro germano de Asuntos Europeos, Michael Link, junto con sus homólogos francés, Bernard Cazeneuve, y polaco, Piotr Serafin, firma una declaración en la que señalan que “a corto plazo la cuestión de la supervisión bancaria es un proyecto muy importante para mejorar la seguridad financiera en la Unión Europea". Los tres países se muestran determinados, según ese escrito, "a trabajar rápidamente para establecer un mecanismo de supervisión único eficaz que implique al BCE".
El único pero que plantean Alemania, Francia y Polonia es la necesidad de examinar cuidadosamente “lo que se refiere al equilibrio de derechos y obligaciones para todos los Estados miembros dispuestos a participar”.
Recordemos que la creación de una unión bancaria es la condición previa impuesta por Europa para que el rescate a la banca española pueda llevarse a cabo a través de la recapitalización directa a las entidades, algo a lo que también se ha opuesto Alemania.