El lobby bancario asegura que la zona euro ha dado un serio giro negativo hacia lo peor en el último mes. Esto ha conducido según este instituto hacia una recesión que sólo servirá, en su opinión, para crear más déficit presupuestario y debilitar la calidad de los activos que tienen las entidades financieras.

Los números también hablan por sí solos porque el IEF pronostica una contracción de la economía del 2%, mientras que para el conjunto del ejercicio 2012 vaticina una caída del 1%. La banca no se calla con la gestión política en la zona euro y sostiene que algunas decisiones sólo han creado más daño como la que más les afecta, la quita de la deuda griega.

El Instituto dice que esa decisión está espantando a los inversores de otros mercados periféricos como el español o italiano mientras a los bancos se les obliga a reforzar el capital de sus balances, una situación que está ahogando a las entidades.

Las consecuencias de esto no podrían quedarse en la zona euro porque según la banca, esta crisis podría extenderse a otras economías alejadas de la zona euro.