El rotativo incide en que el PP optará por esta solución, algo que se pide desde las entidades más débiles y que cuenta con el rechazo de la gran banca, Santander y BBVA entre esta, que prefieren solucionar sus problemas en casa y poder comprar a los rivales que se caigan por el camino. Además, algunas entidades, como Caixabank y Bankia, ya tienen sus propios 'bancos malos' dentro de sus estructuras corporativas.
La gran banca califica de zombis a algunas cajas y asegura que no deben de mantenerse vivos con la ayuda de ninguna institución pública. Otro problema adicional sería el dinero que esto exige por parte del bolsillo del Estado.