Las medidas contra el fraude fiscal anunciadas ayer por el Gobierno de Mariano Rajoy no han sido ni rechazadas ni tampoco aplaudidas por la Comisión Europea. El plan contra el fraude fiscal de Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones Publicas anunciado ayer por Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno tiene como objetivo recaudar 8.161 millones de euros, un aumento de las arcas públicas en el que no confían desde Bruselas ya que estas medidas no garantizan los ingresos que se tienen en previsión.

El portavoz comunitario Olivier Bailly ha evitado referirse con detalles a las medidas anunciadas aunque ha recordado que los planes contra la evasión fiscal han sido motivo de discusión con varios estados miembro porque las cifras estimadas de recaudación son solo papel mojado al no tener ningún tipo de garantías. No obstante Bailly ha mostrado su apoyo a las medidas anunciadas por la portavoz del Gobierno aunque ha afirmado que lo que toca ahora es estudiar estas medidas antifraude al detalle.