Así al menos lo publica el rotativo galo 'Le Monde', que cita fuentes del Elíseo. Sin embargo esa cena no será cosa de tres, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde compartirá también mesa y mantel en una reunión en la que los líderes europeos tendrá la complicada tarea de decirle al primer ministro griego, que aquella ayuda de 8.000 millones de euros aprobada el pasado 21 de octubre y que iba a ser desembolsada a mediados de noviembre, no llegará nunca a Atenas.

Una decisión que provocará, según calcula Francia, que la cartilla griega se quedará sin fondos como muy tarde en diciembre.

Es más, según afirman las filtraciones, que citan a un diplomático galo tras conocerse que el gobierno heleno seguirá adelante con la consulta popular, la zona del euro dejaría que la galera griega navegue a la deriva: “No podemos impedir que los griegos se suiciden", ha asegurado la fuente consultada.

Italia y España.

Todo ello va ha provocar que todas las atenciones de la madre Europa se centren en cuidar que la situación se repita con Italia y España, a pesar de que se reconoce que el contagio ya se ha extendido por las penínsulas italiana y española, “El contagio ya está aquí. Para tener una pequeña idea de lo que provocaría la quiebra de Grecia no hay más que mirar a los mercados”, señala un responsable galo.

Sin embargo, los 'jefes' del viejo Continente aplauden las decisiones que ha tomado el presidente del Gobierno,  José Luis Rodríguez Zapatero, que tomó medidas difíciles y adelantó las elecciones.