Semana decisiva para solventar la crisis de deuda soberana en Europa la que hoy comienza. Sobre la mesa están los distintos planes para intentar evitar una quiebra desordenada de Grecia, pero sobre todo, el intento desesperado por frenar el contagio al resto de la zona Euro.
Si todo va bien, el próximo día 23 tendremos la solución en la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, en donde sabremos si se impone la tesis de Francia, más dinero para la banca, o la de Alemania: se pondrá más dinero, siempre y cuando haya un esfuerzo de contención.
Veremos qué opción resulta ganadora, aunque parece lógico que sea una mezcla de las dos, ya que no parece creíble que el tándem “Sarko-Merkel” vaya a presentarse en Bruselas el domingo que viene con división de opiniones. Sea como sea, lo importante será que Europa lance entonces varios mensajes: se va a ayudar a Grecia, existen planes para solventar la crisis de deuda en el Viejo Continente y a partir de ahora se buscará una nueva arquitectura financiera y económica que conlleve políticas conjuntas de los 17.
Si esas señales no son percibidas por los mercados, la cosa puede ponerse complicada. Y no sería de extrañar que, a partir de entonces, las previsiones de una quita del 20% para países como Portugal, Italia o España, empiecen a resultar creíbles.