Grecia empieza a advertir de que no va a poder cumplir con sus compromisos de reducción del déficit.

Tampoco cree en ello el Fondo Monetario Internacional, que considera insuficientes las medidas adoptadas por el Ejecutivo heleno.

A juicio del FMI, el actual programa de ajustes es insuficiente, y por ello aboga por que Grecia adopte nuevas medidas si es que quiere evitar la bancarrota.

Así aparece publicado también en el diario alemán Der Spiegel, que cita a un documento interno del Fondo, en el que promueve nuvas medidas para Atenas: por un lado pide recortes; después que los acreedores privados cancelen sus inversiones en la deuda helena, y tercero, que los países de la eurozona incrementen el Fondo de Rescate.

Algo que, por cierto, Bruselas ya ha dicho es inviable.