Un auténtico respaldo para el jefe del Ejecutivo, que por fin encuentra un apoyo sobre el que sostener su promesa de crecimiento en 2014. El FMI señala que 2013 va a ser el último año de recesión para nuestra economía, coloca el crecimiento en 2014 en el 1% y apunta a un rebote del 1,6% en 2015.

Es el resultado de las últimas previsiones, que el organismo que dirige Christine Lagarde, ha formulado sobre la reestructuración del sector financiero. Aun así, siguen por debajo de los pronósticos planteados  por el Gobierno, que prevé que en 2014, el repunte sea mayor, y alcance el 1,2%, y roce el 2% en 2015.

Lo cierto, es que desde luego sí son más optimistas que las que hacía públicas ayer la OCDE, que apuntan a un moderado repunte del 0,5% y a las difundidas por la Comisión Europa, que apuntan a un incremento de la economía española del 0,8% en 2014.

Punto y aparte merece el aplauso que el FMI da a los procesos de la reforma financiera aplicada por el Ejecutivo. Afirma, el organismo, que se han logrado “importantes progresos", eso sí, alerta del enorme reto que supone para España, tanto los planes de reestructuración bancaria, como en la entrada en vigor del banco malo.