Una visita clave, que durará hasta el próximo día 26, y que concluirá con la edición de un informe de recomendaciones que será entregado tanto a Bruselas como al Gobierno español. en lo que es una labor de seguimiento para profundizar en los términos a las que ya llegó el Fondo en la visita del pasado mes de agosto.

Vigilar de cerca la reforma bancaria y supervisar “técnica” e independiente una ayuda financiera en la que se viene trabajando desde su aprobación en junio. Y es que, desde ese momento, tanto el Ejecutivo de Rajoy como el Banco de España han proporcionado al organismo presidido por Cristine Lagarde la información necesaria bajo secreto.

Lo deberán seguir haciendo durante los próximos meses tras estos Test Estress en los que se fijó esa cantidad de 59.000 millones de euros como ayuda financiera.