El presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, y la canciller alemana, Angela Merkel, abogan por esperar a conocer los resultados del informe que están elaborando los expertos de la troika antes de tomar ninguna decisión sobre las condiciones que tendrá que cumplir Grecia para poder recibir los 130.000 millones de euros que conforman su rescate financiero. Además, Juncker, que este miércoles se reúne con el primer ministro griego, Andonis Samarás, ha matizado que esa decisión no llegará en ningún caso antes de la próxima cumbre europea del mes de octubre.

Ambos declaraciones llegan después de que un miembro del partido de Angela Merkel, Norber Barthle, especialista en asuntos presupuestarios de la CDU, hay manifestado que "es posible realizar pequeñas concesiones siempre y cuando se hagan estrictamente en el marco del segundo programa de ayuda". Una frase que parecía mostrar una flexibilización en la postura germana. En una entrevista a la agencia Bloomberg, Barthle señalaba que "por ejemplo, se podría reajustar el interés y el vencimiento de los préstamos". Además, justificaba que esto ya ocurrió en el caso del primer rescate.

Por su parte, primer ministro heleno, Andonis Samarás, ha pedido hoy más tiempo para cumplir con las exigencias de la troika. En una entrevista al diario germano Bild, Samarás ha aclarado que no quieren más dinero sino “aire para respirar” y poder cumplir con los compromisos adquiridos. Sus declaraciones coinciden con una ronda de reuniones con varios líderes europeos, que le llevará a Alemania y Francia.