Fernando Luque subraya que la política de Mario Draghi al frente del BCE ha motivado un punto de inflexión en la financiación de los países de la Eurozona con mayores dificultades. No obstante, destaca que, tras demostrar la institución europea que está dispuesta a actuar para calmar la tensión en los mercados de deuda, corresponde ahora a España decidir lo antes posible si quiere recurrir a esa ayuda o no. “El efecto de la decisión de Draghi se difumina, pero lo hace porque todos estamos a la espera de que el Gobierno español pida el rescate”, explica Luque. El experto es claro en este sentido: si el Ejecutivo que dirige Mariano Rajoy sigue demorando su decisión sobre esa asistencia del BCE, los mercados pueden volverse a echar encima de España.

El Tesoro Público ha solventado hoy con éxito su primera colocación de deuda de octubre. Un mes que se antoja complicado en este sentido, ya que es ahora cuando se concentra la mayor cantidad de vencimientos del año, unos 30.000 millones de euros. Este jueves, ha colocado  3.992 millones de euros en bonos a dos, tres y cinco años. En todos ha logrado bajar la rentabilidad con respecto a la subasta anterior, salvo en los de tres años, cuyo interés ha sufrido un repunte del 3% hasta el 4,028%. Fernando Luque entiende que la tranquilidad de estas subastas podría mantenerse todavía por un tiempo, pero conviene no bajar la guardia. “Si no hay decisión respecto al rescate, la prima volverá a subir”, sentencia.