En noviembre los precios suben como consecuencia del inicio de la temporada de invierno en vestido y calzado. Sin embargo, y a pesar de esta subida, la inflación se mantiene en el 2,9%, lejos de cifras por encima del 3% que veíamos en 2010.
Esto se debe en parte al abaratamiento de la gasolina y de los medicamentos, cuyos precios caen más de un 11%. También contribuyen a este descenso otras partidas como la del transporte, que cae cinco décimas o la vivienda, que se abarata un 6%. En cuanto a lo que más sube cabe destacar el ocio y la cultura, el azucar, cuyos precios repuntan un 27%, el tabaco y la calefacción y distribución de agua.
Por comunidades, en todas ellas suben los precios aunque lo hacen con mayor fuerza en Asturias, Cantabria, Navarra y la Rioja. La desviación de precios tendrá como consecuencia una pérdida adquisitiva de casi el 3% para los 5,6 millones de pensionista españoles, ya que el Gobierno sólo revisará las pensiones mínimas y las no contributivas.