Fuentes populares explicaron a Servimedia que Rajoy tratará de propiciar un consenso entre sus presidentes autonómicos, que llegan a la cita con posturas encontradas. Valencia, Murcia y Baleares reclaman flexibilidad, mientras que las cumplidoras se oponen a la fórmula del déficit a la carta.
Rajoy ha preparado una doble cumbre con las comunidades en las que gobierna el PP. Primero se producirá una reunión a las doce del mediodía con los consejeros de Presidencia de las respectivas autonomías y, después, a partir de las dos habrá un almuerzo con los barones autonómicos. La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, serán los protagonistas de la primera parte de la cumbre autonómica del PP.
Ellos serán los encargados de limar asperezas con los consejeros de Presidencia de las distintas comunidades y allanar el terreno para el posterior almuerzo de Rajoy con los presidentes autonómicos. El jefe del Ejecutivo no lo tendrá fácil porque cada uno de sus barones llega con una posición muy firme y sin voluntad de dar su brazo a torcer, ya que todos ellos saben que en sus respectivos territorios se les va a mirar con lupa.
Sin embargo, existe el convencimiento común de que es necesario llegar a un acuerdo y el Gobierno aspira a poner fin a la polémica que en las últimas semanas ha provocado ríos de tinta por los constantes roces con el Ministerio de Hacienda. Por un lado, están regiones como Valencia, Murcia y Baleares, que en 2012 no cumplieron el objetivo de déficit del 1,5% y que ahora piden más flexibilidad al Gobierno de Rajoy para seguir reduciendo el gasto público en este ejercicio.
Sus presidentes aducen que no pueden bajar de golpe al 1,2% que ha propuesto el ministro Cristóbal Montoro porque el sistema de financiación les perjudica y les otorga menos recursos de los que les corresponden. Por ello, volverán a exigir a Rajoy una mejora del modelo de reparto de los ingresos entre comunidades.Por otro lado, están comunidades como Extremadura, Aragón y Castilla-La Mancha, que en 2012 hicieron un tremendo esfuerzo presupuestario para reducir el déficit a lo exigido por La Moncloa. El año pasado pidieron sin éxito que se les diera margen, así que ahora no están dispuestas a que se ayude a quienes han incumplido los deberes.
Desde Extremadura
El presidente de Extremadura, José Antonio Monago, es el más activista de todos ellos, sobre todo porque heredó una comunidad con el segundo peor déficit de España y en apenas año y medio ha conseguido convertirse en la mejor de todas. Monago aprovechó la sesión de control en el Parlamento autonómico del jueves para recordar que en 2012 Extremadura "pidió asimetría" en el objetivo de déficit de las comunidades y entonces "no hubo margen". Se impuso el criterio del 1,5% para todas las autonomías.
Subrayó que su gobierno emprendió entonces un esfuerzo de ajuste para reducir al máximo el desequilibrio de las cuentas públicas, hasta conseguir acabar el ejercicio pasado con un déficit cercano al 0,8%, muy por debajo del objetivo inicial del 1,5% que se había fijado desde La Moncloa."Ahora, al parecer, el discurso es de asimetría y yo reitero una vez más que nosotros estamos en contra de esa asimetría", sentenció. "Si se aduce que hay que tratar a los diferentes de forma diferente, en 2012 ya éramos diferentes y no se trató de manera diferente".