Nuevo varapalo del Gobierno a los directivos de las entidades que han recibido ayudas. El Ejecutivo pretende limitar a 500.000 euros su retribución fija anual. Así consta en el borrador del nuevo Real Decreto Ley sobre el sistema financiero en el que trabaja el Gobierno y que verá la luz verde mañana o el próximo viernes.
Son 100.000 euros menos del tope máximo de 600.000 euros que fijó el Ejecutivo en el primer recorte, aprobado en febrero, y que entró en vigor a principios de agosto. El Ministerio de Economía ha introducido una disposición final en el nuevo Real Decreto Ley para modificar ese texto legislativo aprobado el pasado 3 de febrero.
“La retribución fija por todos los conceptos de presidentes ejecutivos, consejeros delegados y directivos de las entidades que sin hallarse mayoritariamente participadas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, reciban apoyo financiero del mismo será de 500.000 euros”, establece ahora el borrador de la norma. Sí se mantiene la retribución máxima de los ejecutivos de las entidades intervenidas, Bankia, NovaGalicia y Catalunyacaixa, que se queda en los 300.000 euros.
Además, en el texto también se establece que los administradores pagarán por los daños que su mala gestión haya causado a la entidad. "Responderán de los daños y perjuicios causados en proporción a su participación y la gravedad de aquellos", indica.
