El Gobierno va a empezar a elaborar desde hoy una nueva reforma laboral tras concluir el plazo para que los agentes sociales pacten asuntos "troncales", es decir, la contratación, los despidos o los salarios, y sin que las partes se hayan reunido este fin de semana.
Por tanto, ahora mismo sólo hay un acuerdo en materias de resolución extrajudicial de conflictos, de formación profesional, de mutuas y sobre la racionalización del calendario de festivos, y que para el Gobierno es insuficiente.
Durante todo el fin de semana tanto el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como la vicepresidenta y la ministra de Empleo, Fátima Báñez, han urgido a los agentes sociales a que agotaran el plazo marcado y aportaran soluciones sobre temas "troncales" como la flexibilidad interna de las empresas o el absentismo laboral.
El Ejecutivo se ha comprometido a que una nueva reforma laboral esté cerrada en el primer trimestre del año, después de que el anterior Gobierno socialista aprobara otra reforma del mercado de trabajo por decreto ley tras meses de negociación de los agentes sociales y que también terminaron en fracaso.