¿Solución a Grecia? Sí, pero con calma

Se agudiza la cuesta arriba de la crisis económica con los malos augurios de Alemania, que avisa de que no va a ser posible una solución rápida en la crisis de deuda de la zona euro. El país germano tiene muy claro que la cumbre del próximo domingo no va a ser la panacea que esperan los mercados. Quizás la posible condonación de la deuda griega asusta a las locomotoras de Europa, debido a su elevada exposición al país heleno. Sea como fuere, el caso es que Francia debe andar con pies de plomo: Moody's va a estudiar una posible revisión de su calificación.

 

Será durante los próximos tres meses cuando la agencia de calificación vigile y evalúe la perspectiva estable de Francia. Para ello va a considerar los avances hechos por el Gobierno para aplicar las medidas anunciadas de reducción del déficit presupuestario. Recordar que Francia tiene actualmente la nota más alta de Moody's (un "Aaa"), y también de sus grandes competidoras Standard & Poor's y Fitch. Una calificación que permite pedir créditos en condiciones muy favorables para financiar sus déficits presupuestarios. Esta advertencia de Moody's no hace más que confirmar los rumores de algunos economistas alemanes, que preveían un posible recorte de la máxima nota de solvencia que tiene Francia por parte de las agencias de calificación. Los motivos no son otros que la crisis de la deuda y las dificultades de la banca para hacerle frente

Baśicamente, los expertos alertan de que pueda tener los mismo problemas que hubo en Irlanda o en Islandia con los bancos. Una quiebra de buena parte del sistema financiero, que resulte muy complicada de controlar, frenando así las expectativas de recuperación de las economías nacionales y también las europeas.