Con la subasta de hoy, el Tesoro quiere demostrar normalidad, ya que no va a suspender el calendario previsto de emisiones aunque no necesite más dinero de los mercados para cubrir las necesidades y vencimientos de este año. Y es que ya ha cubierto más del 100% de la financiación a medio y largo plazo que tenía previsto captar en 2012.

De hecho, el jueves vuelve a salir al mercado en busca de otros 4.000 millones de euros. Los títulos que sacará a subasta el jueves, a tres, cinco y diez años, cotizan en el mercado secundario con rentabilidades superiores a las contabilizadas en las últimas subastas. Y para el mes de diciembre tiene previstas otras tantas subastas. La contención en el ritmo de emisión ayudaría a paliar un posible incremento de los costes de emisión de los bonos. 

Si miramos la última emisión, el organismo captó 4.763 millones en bonos, más del máximo previsto. Además, fue una emisión particular, ya que el Tesoro aprovechó la calma de los mercados para vender bonos a 20 años. Concretamente, colocó más de 731 millones en este papel.