El control de la inflación se ha convertido en la obsesión del mandato de Jean – Claude Trichet al frente de la institución monetaria, que deja su cargo con los tipos de interés intactos en el 1,5%. Lo cierto es que el francés ha considerado que un recorte, tal y como demandaban varios organismos internacionales, podría suponer un nuevo incremento del IPC, situado cerca del 3%, muy por encima del objetivo del 2% recomendado por el banco emisor.

De esta manera Trichet deja en manos de su sucesor, el italiano Mario Draghi, un futuro giro de la política monetaria, en medio de las extremas turbulencias económicas que continúan engordando el temor a una cercana recesión.

Presiones que no se han pasado por alto para el BCE, Trichet ha anunciado la puesta en marcha de un programa de compra de bonos por valor de 40.000 millones de euros.

El precio del dinero, se encuentran en el 1,5% desde la última subida, llevada a cabo el pasado mes de julio.
Jean – Claude Trichet pone fin – el próximo 31 de octubre – a ocho años de mandato al frente de la institución monetaria, en medio de la crisis de deuda del viejo continente.