La Troika, integrada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, ha anunciado su rechazo a parte del plan de medidas de ahorro presentado por Grecia. El Ejecutivo de Andonis Samaras ha presentado una serie de ajustes de 11.600 millones de euros en distintas áreas para poder desbloquear el siguiente tramos de ayudas: 31.500 millones de euros. Sin embargo, dichos ajustes no convencen a Bruselas, quien apuesta por recortar salarios públicos y pensiones.

Por otro lado, los ajustes en Grecia han abierto la división entre los socios que componen la coalición de Gobierno, sostenida por el socialista Pasok y el centroizquierdista Dimar, quienes se oponen a estas medidas por ser injustas para la población. Hoy las negociaciones van a seguir, aunque estos dos partidos ya han advertido que no aceptarán cualquier condición, por lo que la coalición de Gobierno podría volver a estar en peligro.