Según Tomás Lagunas, Director General de la Fundación ANAR, “la organización atiende dos tipos de llamadas: unas de orientación, en las que resolvemos dudas, damos consejos, información…, y otras de orientación especial, que requieren una valoración psicológica y necesitan intervención o derivación al equipo de trabajadores sociales, abogados y psicólogos de la Fundación. Estos departamentos han realizado en 2012 un total de 13.106 derivaciones a recursos de ámbito jurídico y social; y han tenido que realizar 428 intervenciones urgentes por situaciones muy graves de riesgo para los niños.”
ANAR atendió en 2012 a 1.778 niños y adolescentes víctimas de la violencia: maltrato físico (28,7%), violencia escolar (15,5%), maltrato psicológico (14,7%), abandono (12,4%), abuso sexual (11,5%), agresiones extra familiares (7,6%), violencia de género (6,9%), Ciberacoso (1,5%), Pornografía infantil (0,8) y maltrato institucional (0,4%). El perfil de los agresores es, fundamentalmente: padre (22,5%), compañeros del Centro Escolar (18,4%), madre (15,5%), parejas o ex parejas del menor (8,2%) padrastro/madrastra (8%), o ambos padres (6,3%).
Benjamín Ballesteros, Director de Programas de ANAR, explica: “queremos hacer un llamamiento a la sociedad ya que la violencia infantil es uno de los problemas más graves a los que se puede enfrentar el menor de edad en su desarrollo. Hemos detectado que el 43,5% de los menores atendidos han sufrido algún tipo de violencia durante más de un año, y un 46% de forma diaria”. “La violencia de género en adolescentes es uno de los tipos de violencia emergente en los últimos años, como se recoge en el Informe de Violencia de Género 2012 de la Fundación ANAR.
Detectamos mujeres adolescentes víctimas de violencia de género por parte de sus parejas en edades más tempranas, incluso con 13 y 14 años. Queremos concienciar de este problema, puesto que el 67,4% de las menores atendidas no son conscientes de que están siendo víctimas de violencia de género”.