El garrafón no existe. Así de rotunda se ha mostrado la directora de comunicación de Ron Barceló, Olga Seisdedos, cuando ha explicado para Diario Financiero que se trata, tan sólo, de un mito. Ante esta afirmación es lógico cuestionarse ¿por qué ese terrible dolor de cabeza? Pues bien, la calidad del agua utilizada para el hielo, el material del vaso en el que se vierta la bebida y las condiciones en las que se mantegan las botellas, influyen en el sabor y la calidad del alcohol y, por tanto, en nuestro estado físico posterior.
Desde Ron Barceló, Olga Seisdedos ha explicado que la comunicación y el marketing de la compañía se centra en conseguir un acercamiento con los consumidores. Para ello, y a pesar de las grandes restricciones que limitan al sector, las redes sociales y los eventos son fundamentales. En este sentido, Ron Barceló apuesta por un marketing experiencial que convierta a los clientes en los propios embajadores de la marca.
El sector de las bebidas alcohólicas es un sector muy regulado y con grandes restricciones. Sobre este asunto, desde Ron Barceló respetan todos los límites, como por ejemplo la prohibición de insertar publicidad en eventos deportivos, puesto que promueven el consumo responsable.