La agencia de calificación Fitch ha rebajado la nota de seis grandes bancos, entre ellos Deutsche Bank, Barclays o Credit Suisse, bajo el argumento de que son "particularmente sensibles a las dificultades crecientes de los mercados financieros".
Éstos han visto su calificación recortada en dos escalones, mientras que Bank of America, BNP Paribas y Goldman Sachs han sufrido un recorte de sólo un escalón.
Fitch hace este anuncio justo un día después de que su compañera, Standard & Poor's rebajase la nota a diez entidades financieras españolas como Bankia, Caixabank, Bankinter, y los bancos Popular y el Sabadell.
En este caso la actuación de la agencia crediticia viene motivada por la implantación de los nuevos criterios de calificación.